Sombra de inseguridad cubre SLP

SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 19 de octubre de 2018.- El asesinato de una dentista este miércoles desató la indignación de los potosinos…en redes sociales y el reclamo de un ciudadano que este jueves le espetó en su cara al gobernador, Juan Manuel Carreras López: “San Luis está hoy bañado en sangre”, expresión que confirma la percepción de los capitalinos sobre la inseguridad.

La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reveló que al cierre del mes de septiembre el 88.5 por ciento de los habitantes de la capital se sienten inseguros, lo que en todo el país obligó a los adultos a modificar sus hábitos por temor a ser víctimas de algún ilícito.

Este jueves, Aarón Edmundo Castro Sánchez, Subprocurador de Asuntos Jurisdiccionales en la Fiscalía General del Estado, confirmó que el día anterior Erika fue asesinada de cuatro balazos a unas semanas de parir a su tercer hijo, lo que causó el enojo de miles de potosinos, pero plasmado  sólo de manera virtual.

El crimen aconteció en la colonia San Pablo, de la capital potosina, gobernada desde el pasado primero de octubre por Francisco Xavier Nava Palacios, quien interrogado respecto a la inseguridad que priva en la ciudad adujo que aún es muy pronto para ver resultados y hasta recomendó a los periodistas tratar ese tema con el Director General de Seguridad Pública Municipal, Edgar Jiménez Arcadia.

El mandatario estatal, Juan Manuel Carreas López, rodeado de sus escoltas, evadió a los periodistas sobre el tema, no a un ciudadano que le salió al paso para reclamarle por la inseguridad.

“Lo que paso ayer es una verdadera vergüenza y una tristeza para los ciudadanos señor gobernador”, le dijo el hombre barbado que se le cruzó al Ejecutivo cuando este caminaba hacia su camioneta para abordarla y retirarse de la Unidad Deportiva Universitaria, donde se celebró un foro educativo.

Más adelante la persona, no identificada, le soltó la frase que describe la sensación que tienen los capitalinos sobre la crisis de seguridad. Esto apenas luego de que el pasado martes el Secretario de Seguridad Pública del Estado, Jaime Ernesto Pineda Arteaga, en comparecencia ante diputados locales, con motivo de la glosa del tercer informe del gobernador Juan Manuel Carreras, les pidió: «esto no es fácil, ténganme paciencia».

La ENSU, estudio demoscópico realizado por el INEGI en todo el país, arrojó al cierre del pasado mes de septiembre que el 88.5 por ciento de los potosinos viven con la sensación del temor a ser víctimas del algún acto delictivo.

Comparado el índice de percepción de inseguridad de los capitalinos el dato del mes anterior superó con 1.7 al arrojado en junio de este año, cuando se ubicó en el 86.8 por ciento.

La sensación de vulnerabilidad se acentúa, en todo el país, en los cajeros automáticos instalados en la vía pública, el transporte urbano, bancos, calles habitualmente usadas, etcétera, lo cual ha repercutido en la modificación del hábito en más de la mitad de la población adulta.

El hombre le precisó en su cara este jueves al gobernador: “No hablo de los cárteles, de las cabezas que dejan tiradas, ni cuestiones de ese tipo…eso no nos afecta a nosotros…queremos el robo a transeúntes, queremos salir con seguridad, poder utilizar el celular sin el miedo a que nos lo quiten”.

La inseguridad no es privativa de la capital. En lo que va del año suman casi 50 muertes violentas de mujeres en todo el Estado, una de ellas la abuela de Mya Fernanda, quien luego de desaparecer junto con su nieta fue hallada sin vida en Rioverde.

A fines del mes pasado fue hallado un cuerpo desmembrado en la capital potosina y hace unos días fue hallada la cabeza de un hombre en una hielera en el municipio de Matehuala. La sombra de la inseguridad se extiende sobre el territorio potosino.