Ironía
El final anunciado llegó: El Pollo Gallardo tendrá que colgarse de otras opciones políticas si quiere ser competitivo en su aspiración a ser gobernador de San Luis Potosí, con el apoyo de su partido el Verde, luego que Morena decidió revocar el acuerdo de coalición electoral para 2021, precisamente por el rechazo que entraña su figura.
Según el presidente nacional del PVEM, Carlos Puente Salas, el experredista de reciente incorporación al partido, sería el candidato a vencer el 6 de junio en las urnas, porque así lo dicen las encuestas.
Está claro, sin embargo, que en el camino tanto el Verde como Gallardo cometieron varios errores que empujaron más la decisión morenista.
Por un lado, que Puente se haya puesto en un plan belicoso, como si su partido fuera por sí mismo una máquina de hacer votos, sin darse cuenta que en todas las encuestas -seguramente incluidas las suyas-, un alto porcentaje de posibles electores se pronuncia por Morena, con o sin el Verde. Por otro, el histórico desdén de Gallardo a Morena San Luis, con quienes nunca tuvo acercamiento ni humildad para ganarse su voluntad.
Gallardo no será Gobernador, pero si apoya con sus simpatizantes a la causa morenista, su futuro lucirá mejor, como que le quiten de encima las investigaciones de la UIF y a lo mejor hasta la Fiscalía de Federico Garza Herrera también le hace el favor de dar su propio carpetazo, aunque en los hechos así parece, porque esas investigaciones ya tienen telarañas.
A pesar de tanto dime y direte respecto a la casa encuestadora De las Heras, como la piedra filosofal de las elecciones en 2021, resulta que ni siquiera tiene registro en San Luis Potosí.
De acuerdo con información oficial del Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (Ceepac), solo dos firmas conforman su directorio, con documentación completa. Se trata de Demoscopia Digital y de Massive Caller, ambas S.A. de C.V.
De las Heras, que tiene presencia nacional, pero se ha equivocado en los sondeos presidenciales, era la empresa utilizada por los del tucán para imponerle a Morena su candidato; pero ni de esta, ni de las demás firmas de estudios demoscópicos, es posible conocer su metodología al 100%.
Y mientras tanto, el Ceepac sigue sin dar claridad sobre cómo deben operar todas estas firmas para que el elector tenga una mejor libertad de decisión con base a información fidedigna, porque en este momento hay muchas encuestas fake.
Muestra de la debilidad institucional que aplica en este momento para tratar de contener el irrefrenable avance del Covid 19 en San Luis Potosí, es el sentido llamado que hizo ayer el secretario general de Gobierno, Alejandro Leal Tovías.
Criticó que el Ceepac ni la Secretaría de Salud, contengan los mítines preelectorales con muchas personas, lo que propicia contagios.
Y no le falta razón, porque para muestra tres botones: los mítines del PVEM, el mega evento del alcalde de Valles en la capital potosina, Adrián Esper Cárdenas, para presentar el billete de Lotería con motivos del pasado Xantolo… y el transporte público, donde al menos el 15 por ciento de los usuarios no usa el cubrebocas, todos los días.
Pero a esto hay que sumar manifestaciones en las calles, apertura de negocios nocturnos, bailes callejeros, fiestas caseras, arrancones y una gran cantidad de actividades que nadie ha podido contener.
Y la verdad es que a Leal le toca gran parte de las decisiones para evitar todo lo señalado y no lo hace. ¿Se habrá mordido la lengua?
En una primera impresión, muchos coinciden: Donald Trump le está pagando y con creces al presidente Andrés Manuel López Obrador, su lealtad, al no declarar que México reconoce a Joe Biden como el ganador de una elección que según el mandatario estadunidense, le fue robada en las urnas.
De esa manera se justifica el regreso del general Salvador Cienfuegos Zepeda, quien según las acusaciones que serán retiradas en su contra por el gobierno de EE. UU., era llamado El Padrino por un grupo de narcotraficantes que, se dijo, fueron ayudados por el ex secretario de la Defensa Nacional en el sexenio pasado.
La información es escasa y por lo tanto, incipientes las posibles razones de este raro desestimiento del vecino del norte, pero queda clara una realidad: la política y la diplomacia intervinieron, a tal grado que el canciller Marcelo Ebrard Casaubon declaró que hubo consideraciones de política exterior.
Una de las principales lecturas es que el regreso del militar calmará las aguas al interior de la Sedena y con esto, se fortalece el mando supremo de López Obrador.