Mercado de Coxcatlán: mezcla de olores, sabores y cultura

COXCATLÁN, SLP., 20 de mayo de 2019.- La mezcla de olores, de colores, pero sobre todo ese punto donde la cultura tiene su raíz, es parte del panorama que cada lunes ofrece Coxcatlán en su tianguis.

Considerado el mercadito más grande de la Huasteca, el comercio de los lunes inicia desde las cinco de la mañana, cuando llegan comerciantes de diferentes puntos de la Huasteca potosina e incluso de los estados de Veracruz e Hidalgo para ofertar sus productos.

Zapatos, ropa nueva y usada, herramientas de trabajo, carne, abarrotes, pasando por los comercios de comida donde se puede disfrutar del tradicional zacahuil, hecho con masa martajada carne de cerdo y chile de color cocido en hornos de tierra blanca y por supuesto, las tradicionales enchiladas elaboradas con pequeñas tortillas delgadas embarradas con chile rojo y verde y rellenas de frijol, huevo, papa o carne.

Pero sin duda lo que más llama la atención son sus productos criollos, esos que se cosechan en comunidades como Tlapani y Tampuchón o Ajuatitla, tal es el caso del chayote espinoso, la verdolaga, cilantro, aguacate, el capulín, maracuya, liches, tomate de monte, chile piquín, chile de árbol, higo, moras, nopales, jacubes, flor de calabaza, el carambolo, la piña y otros.

Quien acude al tianguis no podrá dejar de comprar el queso envuelto en hoja de plátano para que guarde su frescura, el chorizo que tampoco utiliza plástico, el pan tradicional y ahora por temporada, los ramos de flores de gardenia.

En el tianguis no hay básculas, los comerciantes de comunidades utilizan la medida de un plato para vender semillas o tomate.
Por si no fuera suficiente con esta mezcla de venta de productos orgánicos, en el atrio de la iglesia de San Juan Bautista, por el lado de la Unidad Deportiva Municipal se ubican los comerciantes ganaderos donde la ciudadanía puede conseguir desde un toro de registro hasta un caballo un burro, cerdos y gallinas incluso mediante trueque de productos.

El comercio se levanta casi a las 4 de la tarde, tiempo suficiente para que las familias puedan recorrer los casi mil puestos.