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CIUDAD DE MÉXICO, Méx., 6 de mayo de 2019.- El Consejo Político Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) determinará esta tarde si decide a favor de la militancia o le dará la espalda, en el método de elección de su nuevo presidente, el próximo 8 de septiembre.
Conforme lo anunciado, hoy se reunirá este consejo integrado por priistas de las 32 entidades federativas y según el punto 4 de la Orden del Día, analizarán y discutirán la suscripción de un convenio de colaboración con el Instituto Nacional Electoral (INE), para la celebración de las elecciones internas donde participan seis candidatos a sustituir a la actual presidenta del partido, Claudia Ruiz Massieu.
Ivonne Ortega Pacheco, José Narro Robles, Ulises Ruiz Ortiz, Lorena Piñón Rivera, Alejandro Moreno Cárdenas y el potosino José Ramón Martell, son los aspirantes a dirigir al PRI. En esencia, la mayoría pide abrir la elección y no dejarla a la cúpula partidista o los delegados, pero también se percibe una cargada a favor de Narro.
El Consejo Político Nacional tendrá la responsabilidad de ratificar o rectificar lo aprobado el 27 febrero pasado, cuando pidieron al INE consultar a la base como método de selección del nuevo jerarca partidista.
El 8 de septiembre, los tricolores determinarán quién de los seis candidatos será elegido para cubrir el periodo 2019-2023.
Uno de los retos que enfrenta Claudia Ruiz Massieu esta tarde, es convencer al consejo, compuesto por mil 200 militantes -entre propietarios y suplentes, así como integrantes de los sectores y organizaciones, etc.-, de hacer la elección, pero falta saber si a través del INE.
El principal escollo, de acuerdo con los consejeros, es que el INE envió un escrito al PRI en el que expone su imposibilidad de organizar los comicios en septiembre, pero sí en enero o febrero de 2019, debido a que debe validar el padrón nacional, y en este momento no tiene las condiciones para hacerlo.
En diversos estados el partido está en proceso de ratificación en su afiliación, lo que sugiere otro contratiempo del que no logra ponerse al corriente la dirigencia nacional ni las de carácter estatal.
El otro inconveniente expuesto por el INE al PRI, es el recurso para organizar los comicios, porque el instituto no tiene una partida especial y el PRI, a su vez, deberá aportar dinero de sus prerrogativas, las cuales ya están etiquetadas.
El PRI llegará a su proceso interno -el que finalmente quede validado hoy después de las 6 de la tarde- con la peor derrota electoral de su historia, debilitado en ambas cámaras federales, con menos gubernaturas y fuga de cuadros a otros partidos, luego de no ser tomados en cuenta en las elecciones de 2018.