Entre amenazas y tensiones eligen a Alcaldesa interina de Tancanhuitz
Ciudad Valles, SLP, 19 de diciembre del 2018.- Con la muerte de don Pascual Oyarvide Sánchez -a los 66 años de edad- el periodismo potosino perdió a uno de sus decanos y máximos referentes, una pluma irrepetible.
Hombre de recio carácter, pero educado con sus semejantes, no sólo fundó cuatro periódicos impresos situados de forma estratégica geográficamente, lo que le permitió cubrir toda la Huasteca Potosina, parte de la Zona Media y del estado vecino de Hidalgo, también supo acomodarse a los tiempos cibernéticos y hacer del Grupo Editorial El Mañana, una potente fuente de información para miles de personas en estos territorios.
Querido por los suyos y su equipo de trabajo, el periodista nacido en el municipio de Tancanhuitz el 20 de noviembre de 1952, fue un referente de la noticia en el estado, un hombre que inspira a las nuevas generaciones a tratar de seguirle el paso.
Pascual Oyarvide nunca perteneció al grupo del montón, sino de quienes hacían periodismo puro, directo y concreto. Su estilo personalísimo de ser y dinámica, lo llevó al éxito de manera trepidante. A los 23 años de edad fundó El Mañana, en Ciudad Valles y de paso acabó con la era del Diario de Valles, un periódico que circulaba por ese entonces y terminó por sucumbir al ritmo que impuso aquel joven en la información diaria.
Con un tiraje enviadable para los números que actualmente manejan periódicos, inclusive, de la Ciudad de México, El Mañana tiene en cada una de sus páginas el sello Oyarvide muy arraigado, muy singular, muy punzante y muy preciso.
El Mañana, sin exagerar, es el Credo informativo de la Huasteca. Lo que ahí no se informe, el pueblo en general no lo cree. Hasta ese punto llegó la credibilidad de Pascual Oyarvide, un periodista controvertido que con el paso del tiempo logró un molde que funcionó durante 43 años y servirá muchos más, ya que sus hijos, formados bajo su cobijo y dirección, son de la misma madera.
Verlo llegar o salir de sus oficinas, siempre fue un acontecimiento, lo mismo donde se paraba. Nunca quiso estar «del otro lado del escritorio», pese a las múltiples invitaciones a participar en las áreas de Comunicación Social. Antes bien, era un asesor de lujo de casi cualquier político, conocedor, de charla amena y claro de ideas, pero también contundente en cuanto a sus acuerdos como empresario.
El Mañana, hoy, es una fuente de trabajo de las más importantes en la Huasteca.
Un referente de la noticia.
El sueño hecho realidad de un hombre: Pascual Oyarvide Sánchez.