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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 26 de enero de 2025.- El sol de mediodía iluminaba con fuerza el desierto que cruza la carretera federal San Luis Potosí-Zacatecas cuando el destino de 13 menores y cuatro adultos cambió drásticamente.
Vestidos con su uniforme del Club Deportivo Real Cachorros, iban entusiasmados a bordo de una unidad tipo Sprinter; el grupo se dirigía al municipio de Guadalupe, Zacatecas, para participar en un torneo de fútbol.
Metros atrás, familiares los escoltaban en vehículos particulares, ajenos al terror que estaba por desatarse.
La emboscada
A la altura del puente de Salinas, dos camionetas pick up —una blanca y otra azul— surgieron a toda velocidad. Cerraron el paso a la Sprinter y frenaron de golpe. Testigos recuerdan cómo hombres armados y se rostros cubiertos descendieron de las camionetas, moviéndose con precisión.
“Bajaron al chofer y lo colocaron en el asiento del copiloto”, narraron.
Sin importar los gritos de confusión y miedo de los ocupantes, los delincuentes tomaron el control de la unidad. La caravana que seguía al grupo no pudo más que observar desde la distancia, mientras los vehículos desaparecían hacia un rumbo incierto.
El desvío
Los criminales dirigieron la Sprinter nuevamente hacia San Luis Potosí, desviándola de la carretera principal hacia una brecha solitaria. A bordo, los menores permanecían en silencio, temiendo lo peor.
Mientras tanto, los familiares alertaron a las autoridades y a otros automovilistas por teléfono. Los hombres armados, equipados con radios de comunicación, fueron informados por sus cómplices de que el auxilio ya había sido solicitado.
La liberación
Fue entonces cuando los agresores cambiaron de plan. Obligaron a los pasajeros a descender en medio del camino de terracería, rodeados de la incertidumbre y el paisaje árido. Los dejaron abandonados, lejos de la carretera federal, antes de desaparecer sin dejar rastro.
Desorientados, los menores y sus acompañantes caminaron hasta que lograron pedir ayuda a un conductor que pasaba por la zona. Gracias a esta intervención, pudieron llegar a la carretera federal 49, donde finalmente fueron resguardados por elementos de la Guardia Nacional y la Guardia Civil Estatal.
Las primeras pistas
Ya bajo custodia, las víctimas fueron trasladadas a la Fiscalía General del Estado, donde rindieron sus declaraciones. Fuentes cercanas a la investigación confirmaron que se están analizando vínculos que podrían involucrar a agentes de seguridad pública en este hecho.