Los antiguos santuarios del séptimo arte en SLP

SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 23 de agosto de 2020.- Antes de la llegada de las grandes cadenas de exhibición cinematográfica, existieron sitios emblemáticos con distinguidos estilos arquitectónicos para albergar los antiguos cines de la capital potosina, en los que se proyectaban en sus grandes salas las películas que formaron parte de la llamada época dorada del séptimo arte.

A pesar de su auge en el siglo XX, los cines que mencionaremos a continuación —y que fueron considerados modernos para la época—, desaparecieron con el paso de los años (a excepción de la Cineteca) y han sido remplazados por otro tipo de establecimientos, por lo que vale la pena recuperar la memoria de estos espacios.

CINE AZTECA

Lo que actualmente alberga al Congreso del Estado en la Plaza de Armas, en su momento fue el Cine Azteca, construido a petición de don Alfredo Lasso de la Vega.

Este cine construido con motivos aztecas y la razón de la que se deriva su nombre, fue inaugurado en el año de 1928 con la exhibición de la cinta de sonido Sonny Boy. Contaba con tres localidades: luneta, balcón y Galerías, conocida como gayola.

Debido a su éxito, sobre todo entre la población joven, el cine fue ampliado por lo que llegó a tener una capacidad para mil 400 espectadores, además de ser la primera sala en emplear el vitáfono, para emplear un sistema de “sonido-a-disco” y que marcó la entrada del cine sonoro.

Sus funciones eran frecuentes y durante el intermedio aparecía un letrero en el que se invitaba al público espectador a mirar al techo, pues en él se proyectaban luces de colores que se movían al ritmo de la música. Posteriormente, durante los intermedios y mientras el pianista tocaba alguna melodía, se proyectaba en la pantalla la letra de dicha canción para que fuera coreada por los espectadores.

El Cine Azteca funcionó de manera ininterrumpida hasta la década de los 80, cuando las grandes salas decidieron ceder su lugar a las pequeñas salas de proyección.

CINE OTHÓN

El Cine Othón fue levantado en parte de lo que una vez fue la casa del comandante José Toribio de la Cortina, quien fue asesinado por los insurgentes en noviembre de 1810. En el patio de esta casona se abrió en 1908 el Salón París para eventos sociales, que en ese entonces era propiedad del señor Miguel Sánchez.

Tiempo después, en 1911, el cine sufrió algunas modificaciones y para 1914 volvió a ser reinaugurado luego que se ampliara su capacidad para poder recibir a mil 400 espectadores, por lo que así pasó de ser una sala de diversiones a un teatro que cumpliera con las necesidades de la población.

Sin embargo, el edificio fue demolido y para 1929 comenzó la construcción de un nuevo recinto, el cual fue reinaugurado el 19 de abril de 1930 bajo el nombre de Cine Othón, con un espacio de más de más de mil 200 butacas en los espacios superiores. En él no solo se proyectaban películas, sino que también se llevaban a cabo festivales y obras de teatro.

Actualmente, solo permanece la fachada del cine y el lugar alberga la Plaza de la Tecnología.

CINE AVENIDA

Ubicado en la esquina noreste que forman la Avenida de Venustiano Carranza y la calle de Tomasa Esteves, se encuentra el edificio que una vez albergó al Cine Avenida, considerado el más lujoso y caro jamás construido en San Luis Potosí.

Este cine comenzó a ser construido en 1944 bajo la orden del señor José Vilet Ribé, quien era un fanático de los largometrajes, y quedó concluida en octubre de 1947.

El edificio fue considerado una obra arquitectónica moderna para la época, además de que tenía el objetivo de ofrecer lujo y comodidad a los espectadores, gracias a que su interior estaba decorado en colores y con motivos marinos.

Contaba con una escalera de grandes dimensiones para dar acceso al mezanine, cuatro puertas para entrar a la sala de espectáculos y una más para el anexo en donde se localizaban los sanitarios. También se contaba con un espacio para la dulcería y las casetas telefónicas.

El Cine Avenida estuvo en funcionamiento como tal por aproximadamente 30 años, pues fue cerrado durante la época de los 80 y para los 90 fue rentado a una compañía de cines que modificó su interior para construir pequeñas salas de cine.

Y EL RESTO

Además de estos cines, en los finales de los 70 y a principios de los 80 fueron inaugurados los cines Gemelos, el cual contaba con dos salas en el mismo inmueble, el cine Muñoz y el cine Arizona, este último inaugurado en los 90 y con solo cinco años de funcionamiento.