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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 25 de abril de 2024.- El director del grupo Cava, Salim Gutiérrez, dio a conocer el crecimiento de una cultura vitivinícola en la zona centro del país, destacando la existencia de seis casas productoras de vino en la región de San Luis Potosí, las cuales compiten a nivel nacional con otros 15 estados productores. Además, resaltó el auge paralelo en el mercado mezcalero de la entidad.
Gutiérrez precisó que el costo por la venta de vino tiene un gravamen de cerca del 26 por ciento de Impuesto Especial sobre la Producción (IEPS), que sumado al impuesto al Valor Agregado (IVA), eleva los costos de venta de la botella final. Esto, ante un mercado internacional con precios más bajos, genera una competencia poco justa para los productores nacionales.
Además de los altos impuestos, los productores de las marcas de vino deben considerar los costos de producción de elementos distintivos, como el tipo de botella, las etiquetas, los corchos, la publicidad y el tipo de uva que se utilizará en la elaboración del vino.
El costo puede variar según diversas características de la uva empleada. Es decir, no todas las uvas tienen el mismo precio, provienen de la misma región o producen el mismo sabor, lo que genera diferencias en los costos de cada botella. Además, estas deben pasar por un proceso de conservación en diferentes barricas con tonalidades y sabores distintos, lo que aumenta el costo de producción y se suma a la falta de cultura en el vino.
Actualmente, no solo en la entidad potosina, la escasez de agua se ha convertido en un tema que ha reducido la producción en varias ramas de la industria, como el caso del vino. Esto ha generado problemáticas, como en Querétaro, donde la falta de agua ha producido una escasez de uva, obligando al sector vinícola a buscar alternativas para satisfacer la demanda, como la introducción de uvas de otras regiones del mundo, lo que afecta el concepto de denominación de origen.
En el caso de San Luis Potosí, los viñedos han optado por emplear mecanismos de recolección de agua, riego por goteo e incluso la utilización de pozos para mantener la producción de vino en la región. Sin embargo, la región no está exenta de enfrentar dificultades generadas por el cambio climático en la industria.