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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 30 de septiembre de 2019.- Existe un cuerpo en la cámara fría de la Fiscalía General del Estado (FGE) que data del año 2012, relacionado con una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR), del cual no hay mandato de autoridad judicial para que pueda ser devuelto a algún familiar o enviado a la fosa común potosina.
Aunque es el más antiguo, no se trata del único caso, porque en la actualidad hay 51 cuerpos en calidad de desconocidos, de acuerdo con la vicefiscal científica de la FGE, Verónica Edith Salazar Pérez.
“En las cámaras frías de la capital tenemos capacidad de recibir 30 cuerpos, en Matehuala, Rioverde y Valles, hay otras, sobre todo en el municipio huasteco, gracias al fiscal Federico Garza Herrera”, reconoció.
La funcionaria explicó que la FGE solamente interviene en muertes violentas, de personas identificadas o sin identificar, levantadas por el Servicio Médico Legal (Semele) e ingresadas a sus instalaciones, donde se inicia un expediente de cadáver que contiene pruebas periciales odontológica, médico legal, criminalística en materia de fotografía forense y se practica la necropsia de ley con el mandato ministerial para determinar la causa del deceso o bien, cualquier otra situación que el Ministerio Público pueda solicitar.
También se llevan a cabo dictámenes químicos sobre la ropa, manos y dedos, pero todo depende de la naturaleza de la muerte sufrida por la víctima.
DEVOLUCIÓN A FAMILIARES
La vicefiscal Verónica Salazar aclaró que la identificación de un cadáver para ser entregado a sus familiares, tiene diversos tiempos, depende de las pruebas solicitadas.
“Familiares, amigos o conocidos de la víctima en carácter de desaparecido o no localizado acuden con nosotros, porque ofrecemos este servicio las 24 horas del día, los siete días de la semana, durante todo el año. Nos solicitan información y a su vez, nos relatan ciertas características sobre la persona y nosotros revisamos esos expedientes físicos que tenemos para ver si existen coincidencias. Inclusive, pueden acceder a ver el cadáver y si tienen alguna duda, procedemos a realizar los dictámenes periciales que el Ministerio Público nos vaya indicando”, explicó.
A LA FOSA COMÚN
Cuando no se logra identificar a la persona, se establece un determinado tiempo para el resguardo del cuerpo, pero una vez terminado es llevado a la fosa común, de acuerdo a lo señalado por Verónica Salazar.
“Cuando un cuerpo no es identificado se realiza su expediente personal, se hace del conocimiento al MP y es quien determina en qué momento nosotros generaremos el protocolo para llevarlo a la fosa común. En el año 2018 se llevaron 20 cuerpos y en lo que va de 2019, sumamos cinco”.
En el traslado a la fosa común intervienen diversas dependencias públicas como la Secretaría de Salud, el MP, la Policía de Investigación y Servicios Periciales.
“La Ley General de Salud nos establece los parámetros de la temporalidad de los cuerpos en el Semele, nosotros no podemos actuar y enviarlos a la fosa común, tenemos que esperar el mandato ministerial”, aclaró.
AVANCES EN SAN LUIS
El nivel de los forenses potosinos en comparación con otros estados es importante, según estableció la vicefiscal científica.
“Se han fortalecido los laboratorios, contamos con equipo e insumos necesarios, pero carecemos de personal capacitado. En el estado solamente tenemos tres peritos en materia de genética forense y la carga de trabajo es bastante, si bien la capacitación es constante”, señaló.
CASO ARMANDO HERNÁNDEZ
En el caso del policía estatal Armando Hernández, cuya familia no aceptaba que se tratara de él pese a las primeras pruebas científicas, la vicefiscal Verónica Salazar estableció que no solamente hubo dictámenes genéticos sino otros estudios.
“A grandes rasgos puedo decir que además del dictamen de genética forense, tenemos la identificación antropomédica (composición corporal) y de dactiloscopia (comparación de huellas digitales)”.
EL ADN
En materia de genética forense, la FGE puede tener una muestra para determinar el ADN de los cadáveres, se trabaja en cuatro fases y si a la cuarta oportunidad no se genera, se reinicia el proceso las veces que sea necesario.