Dieron consulta a 28 mil 300 pacientes crónicos en San Luis Potosí
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 7 de octubre de 2019.- En las seis cárceles del estado hay al menos 79 internos -recluidos por diversos delitos- que enfrentan padecimientos crónicos, mentales y diversas discapacidades físicas; sólo en el centro penitenciario de La Pila se contabilizan 54 enfermos en total y 43 de ellos con trastornos mentales.
Los detenidos en mención cumplen sentencias por delitos como secuestro, robo, violación, homicidio, etc.
De acuerdo con información de la Dirección General de Prevención y Reinserción Social de San Luis Potosí, reportada vía transparencia, hay presos que tienen amputaciones o discapacidad parcial que adquirieron durante los actos delincuenciales por los que actualmente se les mantiene presos.
En otros casos enfrentan diversos tipos de cáncer y se encuentran bajo tratamiento, que les hacen llegar directamente a la prisión donde se ubiquen, sea en la capital potosina, Rioverde, Matehuala, Ciudad Valles, Tancanhuitz y Tamazunchale.
Al menos 12 presos en Rioverde viven con amputaciones, discapacidad física y motora, los delitos que cometieron son homicidio, violación y secuestro; en el municipio de Matehuala, el registro es de un sólo interno, diagnosticado con ceguera por avulsión y cumple una condena de seis años y 11 meses por robo calificado.
En Ciudad Valles hay recluidas seis personas con distintos malestares, desde amputación hasta cegueras, dolores crónicos por cáncer; sus crímenes fueron secuestro, portación de arma, robo, violaciones, homicidio y crimen organizado.
En los municipios huastecos de Tancanhuitz y Tamazunchale se registran cuatro y dos respectivamente, con enfermedades motrices y psicosociales, ellos cometieron homicidio, feminicidio y violencia familiar.
Certificación para prevenir
De acuerdo con la titular de la Unidad de Prevención y Reinserción Social, Margot Montes Sandoval, la atención medica en penales es tema prioritario y para ello cuentan con una plantilla que atiende la salud de los internos, quienes son evaluados por un médico desde su ingreso y está disponible las 24 horas para atender cualquier emergencia.
La ley establece que todos los Centros de Reinserción Social están obligados a contar con clínicas para prevención y atención primaria de enfermedades.
«Cada penal debe estar debidamente certificado por la Asociación Americana de Correccionales (ACA), aunque en el estado sólo Ciudad Valles cumple el requisito y los demás están en proceso”, citó.
Sobre estos espacios, citó que además cuentan con atención dental y una buena noticia es que el penal de Tamazunchale está certificado como libre de caries.
En cada centro de reinserción social hay radiólogos, químicos y pequeñas farmacias, también realizan campañas de prevención como estudios de papanicolaou, mastografías, mamografías y aplicación de métodos anticonceptivos permanentes para mujeres, mediante procesos voluntarios.
Problemas mentales
Juan Antonio Romero Martínez, colaborador de la Unidad, asegura que las enfermedades mentales no son tan alarmantes como señalan las cifras otorgadas vía transparencia, pues algunos internos atraviesan lapsos de inestabilidad por el impacto de sentirse encerrados, pero después de tratarlos se regulan y dejan de pertenecer a este grupo.
«En las estadísticas se toman en cuenta síntomas como depresión, ansiedad y culpa de parte de los presos, quienes reciben pláticas psicológicas”, abundó.
Los internos que permanecen en tratamiento psiquiátrico por problemas más serios, son relegados al área de inimputables, según determinación del juez y ahí los mantienen en un ambiente de tranquilidad para que no sean un peligro para ellos y tampoco para la población interna.
Romero comentó que algunas de esas enfermedades mentales que desarrollan tienen relación con el consumo de drogas, debido al llamado síndrome de abstinencia.