En Quadratín San Luis Potosí, lo grande comienza
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 9 de diciembre de 2018.- El “Colectivo Raíces” presentó la charla “Los Mayas y el Destino” en el que habló sobre el calendario Tzolkin, calendario maya ritual que utilizaban los sacerdotes para saber el destino de las personas, en el que se combinan números y símbolos.
El maestro Alejandro Gallegos, fundador del colectivo, explicó que este equivalente al Tonalpohualli azteca, cuenta con un ciclo sagrado de 260 días, constituido por veinte trecenas. Indicó que los 13 números hacen referencia al hemisferio izquierdo, “el que piensa como va a hacer”, mientras que los 20 símbolos usan el hemisferio derecho del cerebro que corresponde a la creatividad, “es el símbolo que nos conecta del pasado al futuro”.
En el calendario, los símbolos intercalan colores correspondientes a los elementos de la naturaleza: rojo es fuego (cambio); azul representa la tierra (materialización), mientras que el color amarillo al agua (fluidez) y el blanco es viento (ideas). Estos colores se intercalan todos los días.
La unión de estos cuatro elementos en el calendario Tzolkin, da como resultado un tiempo circular, fluido.
Explicó que este calendario siempre ha sido utilizado desde que los usaron los olmecas, para pasar a los toltecas, mayas, teotihuacanos y aztecas pues fue heredado.
El Tzolkin forma parte de una cosmovisión, las cuales son creencias que conforman la imagen del mundo que tienen una persona, una época, una cultura o un grupo social. Esta se divide en dos tipos: heliocéntrica y antropocéntrica; la primera, establece como eje central a la luz, el sol, mientras que el segundo lo ubica como centro y medida de todas las cosas.
Indicó que para poder entender una civilización y su cultura, se deben entender tres mitos: el cosmogónico, que tratan del origen, el orden y el caos; el antropogénico que narra la creación del hombre; y de trascendencia, lo que sucede después de la muerte, el inframundo.
Explicó que una cultura y su identidad se caracterizan por sus símbolos y a través de estos se crea la realidad de las personas. Si no se cuenta con ellos no se es parte de la cultura.
Agregó que el hombre vive en un universo simbólico y no accede de forma directa a las cosas, sino que se vale de una compleja red simbólica para acceder a ella, entra en lo inconsciente y se materializa en lo inconsciente.
Por último indicó que el símbolo da identidad, lo suficiente para tener claridad cultural y se estructura en el imaginario social, esa dimensión inconsciente que nos permite conectarnos con nuestra comunidad y pertenecer a la sociedad.
El Colectivo Raíces se conformó con el objetivo de rescatar, preservar y difundir las orígenes de México.
Se planea llevarlo a Canadá con el fin de impartir cursos, talleres, conferencias y exposiciones para que conozcan diversas culturas de México, aunque también se planea acercarlo a ciudades cercanas de San Luis Potosí.
En 2019 corresponderá a la cultura maya y cada año se cambiará a otras civilizaciones como la azteca, teotihuacana, olmeca, entre otras.
El maestro Gallegos conformó el colectivo como tal en 2017, pero había trabajado en él desde hace más de 15 años, sin embargo tuvo que ponerlo en pausa por su trabajo en la abogacía.