Certeza jurídica en predios ejidales, reto para el desarrollo urbano de

SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 17 de marzo de 2019.- El crecimiento urbano de la capital ha mermado, no sólo por el alto precio del suelo sino por la falta de certeza jurídica en las tierras ejidales que la rodean, lo que además ha provocado cada vez más construcciones fuera de la mancha urbana y que las familias que las habitan carezcan de servicios básicos, advirtió el ex delegado de la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra (Corett) en el estado, José Federico de la Torre Rodríguez.

Relató que en todo el país hay más de siete millones de lotes o propiedades sin certeza jurídica y aunque en San Luis no existen datos porque no hay estudios al respecto de parte del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), un estudio de la Corett arrojó que en San Luis Potosí capital y Soledad de Graciano Sánchez hay una importante cantidad de predios irregulares.

Federico de la Torre recordó que el problema data de la década de los años 20´s, cuando en el país, después de la Revolución Mexicana, se crearon los ejidos y ello provocó hoy que el 60 por ciento del suelo del país fuese propiedad social, es decir, ejidal y comunal, lo que significa alrededor de 130 hectáreas.

Tan solo en San Luis Potosí hay más de mil 200 ejidos donde las personas jurídicas con patrimonio propio se rigen por una Ley Agraria y su máxima autoridad es una asamblea, donde entre todos los ejidatarios deciden el destino y uso de las tierras, lo que ha generado grandes conflictos con empresas constructoras y el mismo gobierno, pues no pertenecen al estado, pero tampoco hay certeza jurídica que le garantice a los ejidatarios la propiedad, debido a las irregularidades que persisten, por lo que es urgente encarar estos problemas y darles salida, dijo.

De la Torre señaló que tan solo en la delegación de La Pila, que tenía alrededor de ocho mil hectáreas de terreno, surgieron disputas por predios que hace 30 años “no valían nada”, dijo y los que hoy están en zona calificada como “la zona dorada” para la industria, por lo que ahora se cotiza en elevados precios el metro cuadrado en la zona, “el problema es que el suelo ha dejado de ser un bien social y es una mercancía cara”, explicó.

Recordó que durante el sexenio presidencial de Enrique Peña Nieto el gobierno federal impulsó una política de regularización de predios a través del Programa de Apoyo a los Avecindados en Condiciones de Pobreza Patrimonial para Regularizar Asentamientos Humanos Irregulares (PASPRAH).
A través del cual se asignaba un subsidio para que la gente de escasos recursos, que ocupaba su predio como vivienda no pagara la escrituración, pero con este gobierno federal, el programa se transformó y contempla entregar directamente a las personas hasta 13 mil pesos de apoyo gubernamental para la escrituración.

Sin embargo, aseguró, el principal reto es que se logre regular, para garantizar el crecimiento y desarrollo urbano no sólo en la zona metropolitana del estado, sino en muchos lugares del país.