El panteón del Saucito: un espacio de tradición e historia en San Luis
SAN LUIS POTOSÍ, SLP. 22 de agosto 2018. – Desde hace 30 años don Francisco Javier Contreras Ramos hace honor al lema «Voluntad entrega y sacrificio», valores que identifican el cuerpo de bomberos, en el cual trabaja.
A los 17 años empezó como apagafuegos, pues su padre y hermanos también se dedicaban al oficio. A su corta edad enfrentó la primera encrucijada y relata que cuando su esposa era su novia la dejó plantada: “nos quedamos de ver para ir al cine, pero en el camino se me atravesaron los bomberos y me fui atrás de ellos”.
Regresó por ella, pero ya no la encontró. Al verla después ella le ofreció dos opciones: “Los bomberos o yo”. Frente a ese dilema le remarcó: “Conocí primero a los bomberos, así es que tú sabes”. Hoy llevan tres décadas de casados.
Al paso de los años, su ya esposa le planteó la misma disyuntiva y entonces su respuesta fue: “Por los bomberos soy lo soy y tengo lo que tengo; de los bomberos solo me vas a sacar con los pies por delante».
Los rescates de una persona de la tercera edad y de un bebé durante un incendio han sido las experiencias más satisfactorias para Francisco Contreras, quien además recuerda un triste capítulo.
«Atendimos la emergencia en una dulcería del centro. Llegamos tarde y me tocó sacar el cuerpo de una mujer, quien fue amiga en mi infancia”.
Don Paco contó que comenzó como bombero asalariado y jubilado continuó como bombero voluntario.
Comentó que en la actualidad las condiciones laborales de los apagafuegos han mejorado, pero lamentó que en México ese oficio no sea visto como una profesión, de manera que tengan acceso a mejores prestaciones.
«Un señor que vendía paletas en un carrito ganaba más que nosotros a la semana y trabajaba solo viernes, sábado y domingo. Nosotros ganábamos en ese entonces 11 pesos semanales», recordó.
Este martes 22 de agosto, se celebra el día del Bombero, y en dicho marco, Francisco hace un llamado a las autoridades para solicitar el apoyo para él y sus compañeros pues afirma: «nosotros trabajamos con empeño, humildad y para todos, sin distinción de credo razas ni nada; salvamos vidas arriesgando la propia», finalizó.