Humanidad rumbo a la ruina si no atiende cambio climático
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 2 de junio de 2020.- Hablar de un certamen de belleza, para muchas personas significa seres humanos de perfección física en todos los aspectos, pero los certámenes de belleza han evolucionado significativamente a través de los años; actualmente, para escoger una reina, la decisión no sólo se basa en el aspecto físico o una buena pasarela, sino que cada vez toman más importancia aspectos como su capacidad intelectual, carisma y facilidad de expresión.
En Costa Rica, un país experto en eventos de belleza, se encuentra una modelo ejemplar que es todo un suceso que ha roto todos los paradigmas del famosos sinónimo de superficialidad, ella es Amanda Rojas de 17 años de edad, una chica estudiante de onceavo grado, con una discapacidad que no es obstáculo en ella para realizar una vida plena. Actualmente incursionando en el mundo de los certámenes.
“Soy una chica que siempre ha sentido una gran atracción y admiración hacia el mundo de la moda y los certámenes de belleza, en fin todo aquello que involucre ‘estilo’, según lo que nos ha hecho creer la sociedad a lo largo de los años, lo cual no es malo en tanto tengamos nuestra propia identidad y seamos seres auténticos que no se mueren solo en función de lo que dicta una sociedad sino que también tienen criterio e intentan y logran enfrentar de la mejor manera posible los desafíos que se presentan día con día”, nos compartió en entrevista exclusiva.
“En mi caso a lo largo de mi vida me ha tocado lidiar con rechazos, prejuicios y desprecios que se originan principalmente a partir del hecho de que nací con una discapacidad motora que me impide, hasta cierto punto movilizarme con normalidad, pero a fin de cuentas soy una chica ordinaria, con una vida como la de cualquier otra persona, cuyo mayor deseo es ser una influencia positiva para la sociedad, que tenga la capacidad y el privilegio de transmitir un mensaje de igualdad y solidaridad que elimine en la medida de lo posible las injusticias, aunque estoy consciente de que esto suena como una utopía, sé y estoy segura de que a medida que vayamos trabajando en conjunto para hacer del mundo en el que vivimos un mejor lugar, sí podremos alcanzar dicho objetivo”, agregó la lindísima Amanda en nuestra conversación muy emotiva y agradable.
“Una de mis metas es ser comunicadora, busco la oportunidad de que se me abran muchas puertas como medios de comunicación y redes sociales, que me permitan tener contacto con la gente y por ende me den la posibilidad de transmitir un mensaje que promueva la conciencia social y la humanización de todas o la mayor parte de las personas que conformamos la sociedad”, culminó Amanda a quien le deseamos todo un éxito de vida.
SU FRASE:
“Yo creo fielmente en que si una persona desea algo con todo su corazón, tiene que ser constante, perseverante y no rendirse nunca, por más oscuro que sea el panorama”