Capturan a 2 hombres tras intento de robo en consultorio
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 5 de octubre de 2018.- Este sábado se cumple un año de que fue ejecutado el fotoperiodista potosino Edgar Daniel Esqueda Castro, de 23 años, de edad, quien un día antes de ser asesinado fue privado de su libertad por hombres que presuntamente se identificaron como agentes de la Policía Ministerial del Estado.
A casi un año del crimen que sacudió a trabajadores de los medios de comunicación de San Luis Potosí, por tratarse del primer homicidio de un periodista en la entidad, poco o nada se ha esclarecido del asesinato.
La versión de la Fiscalía General del Estado (FGESLP), es que las indagatorias continúan y están a cargo de la Procuraduría General de la República (PGR), instancia que atrajo el caso para dar tranquilidad a la familia, en un contexto en el que se señala como presuntos responsables a elementos de la Policía Ministerial.
El Fiscal, Federico Garza Herrera, asegura que aunque el caso es atendido por la Federación, la dependencia a su cargo se mantiene atenta a las líneas de investigación y que hay una indagatoria sólida para establecer quiénes mataron a Edgar Daniel, aunque no precisa señalar si se trata de policías.
“No quiero especular sobre eso. Consideramos nosotros que en breve se puede tener un resultado positivo en las investigaciones», señaló el funcionario.
Cabe recordar que la privación de la libertad de Edgar Daniel Esqueda, ocurrió en presencia de su madre, quien falleció unos dos meses después del asesinato de Daniel.
El caso del fotoperiodista asesinado fue atraído por la comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), mientras que a nivel estado, la Comisión Estatal Ejecutiva de Atención a Víctimas (Ceeav), mantiene la representación jurídica de los familiares.
Edgar Daniel Esqueda Castro fue encontrado sin vida el seis de octubre de 2017 en inmediaciones del Aeropuerto Internacional Ponciano Arriaga. Su cuerpo tenía huellas de tortura y un disparo de arma de fuego en la cabeza.
Una semana después de su muerte apareció en redes sociales un video en el que supuestamente confesó haber formado parte de una organización delictiva. Nunca se aclaró la procedencia ni la autenticidad de las declaraciones que Edgar Daniel hizo bajo evidentes signos de tortura.
Hoy, la familia de Daniel, sus amigos y compañeros del gremio periodístico mantienen la exigencia de justicia y esclarecimiento público sobre su homicidio, siempre bajo la idea de que “no se mata la verdad matando periodistas”.