Murió acribillado frente al antro Dallas de Noche, en Soledad
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 21 de octubre de 2018.- «México es un país humanitario, no nos contagiamos de la viruela norteña», dijo el arzobispo de San Luis Potosí, Jesús Carlos Cabrero Romero, cuando se le cuestionó la postura de la iglesia respecto a los actos y comentarios racistas que muchos mexicanos manifestaron tras el cierre de la frontera sur para impedir el paso de la Caravana del Migrante que se dirigía a Estados Unidos.
Señaló que México siempre ha sido un país humanitario, que sabe ser solidario y por ello no debe olvidar que existen muchas otras formas de respuesta para la migración, pero jamás debe ser la represión y mucho menos la muerte.
Calificó que está situación no es más que una consecuencia del sometimiento que América Latina tiene con el país del norte, Estados Unidos, incluso consideró que el problema al sur de México en la frontera con Guatemala, no es propiamente de los mexicanos, sino de quienes están al frente de las fronteras.
El Arzobispo, dijo concordar con las declaraciones del Padre Charly hechas a Quadratín, donde declaró que la atención al migrante es más un acto de humanidad y de sentido común, que de política, y aprovechó para hacer un llamado a la sociedad mexicana para recordarles que en los sismos y desastres naturales, México siempre ha recibido ayuda de todas las naciones, por lo que la humanidad y solidaridad debe prevalecer por sobre cualquier cuestión política.
Finalmente en el tema de la seguridad en la capital potosina señaló que no se pueden ver cambios inmediatos, como lo ofreció durante su campaña Xavier Nava pues dijo, «Una cosa es cuando ves las cosas desde lejos y otra cuando ya estás en el gallinero».
Añadió que si bien, 21 días de gestión administrativa no son suficientes para observar un cambio, sí es necesario dar prioridad a este tema y no dejarlo de lado, pues es una necesidad urgente de la población.