
Villa de Pozos busca contar con 100 policías antes de finalizar 2025
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 24 de junio de 2025.- Con rostros de angustia y el temor reflejado en sus palabras, cientos de familias de la Huasteca potosina enfrentan las consecuencias de los remanentes del huracán Erick, que ha dejado a su paso lluvias intensas, deslaves, inundaciones y un doloroso recuento de daños.
“No quisimos salir porque teníamos miedo de dejar nuestra casa, pero el agua nos obligó”, cuenta una mujer de la comunidad afectada por el desbordamiento del río Coy, donde más de 530 personas vieron sus hogares inundados.
La Coordinación Estatal de Protección Civil confirmó que 30 localidades permanecen incomunicadas, mientras continúan los recorridos para llevar apoyo humanitario.
Hasta el momento, se han evacuado a 650 personas, cinco de ellas en condiciones críticas, y más de 170 familias han tenido que ser refugiadas en albergues temporales. La tragedia también ha cobrado la vida de dos personas, cuyas identidades no han sido reveladas.
“Lo perdimos todo… pero al menos estamos vivos”, dijo un padre mientras sostenía a sus hijos en uno de los refugios habilitados por las autoridades estatales y municipales.
Además de las afectaciones humanas, se reportan nueve deslaves, dos socavones y un puente dañado en Tanquián de Escobedo. Por seguridad, las autoridades iniciaron el desfogue de las presas La Lajilla y La Cañada del Lobo, ante el riesgo de desbordamiento.
Mientras la Coordinación Estatal de Protección Civil se mantiene en alerta permanente, las familias afectadas siguen esperando ayuda, comida caliente y la esperanza de poder reconstruir lo que el agua se llevó.