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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 6 de febrero de 2024.- Hundidos en una pesada burocracia que les ocasiona gastos, riesgos y tardanza en trámites de areteo, los mil 900 productores de Tamuín agrupados en Unidades de Producción Pecuaria (UPP) y otros en PSG o Prestadores de Servicios Ganaderos, están demandando mayor atención y apoyo de la Unión Ganadera Regional (UGR) que encabeza Alejandro Ruelas.
Tamuín, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), es el primer productor de ganado en el estado de San Luis Potosí con un registro de 300 mil cabezas, pero increíblemente sólo cuentan con una sola ventanilla del Sistema Nacional de Identificación Individual de Ganado (SINIIGA) para tramitar los aretes para sus redes, alojada en las oficinas del organismo.
Sin embargo, explicó Sabás Guerrero, productor del sector social y pequeños propietarios, la ventanilla sólo está facultada para recibir actualizaciones del productor.
Y aquí viene otro tropiezo, porque si en la ruta sólo tiene uno o dos aretes, espera que haya más productores para aretar y le convenga por el costo de la gasolina.
Además, si no pudiera acudir el día señalado por lluvia que dificulte el camino y otras causas el ganadero debe volver a pagar.
De plano la Unión Ganadera no mueve un solo dedo para resolver estos obstáculos que afectan especialmente a productores de un hato chico y a todos que de por sí enfrentamos las dificultades de la sequía, comentó Sabás Guerrero.
El sector social y pequeños productores, refirió, “estamos proponiendo que las oficinas de Tamuín sean autorizadas para que podamos realizar ahí mismo todo el trámite y cuente con personal facultado para autorizar los aretes sin necesidad de viajar hasta Valles por una firma”, ya que además de lo fastidioso corren riesgos en la carretera.
El papel de la Unión Ganadera viene siendo cuestionado por las fallas e incompetencia que registra para brindar buen servicio a sus socios.