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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 13 de enero 2020.- A diferencia de las escuelas secundarias, que sí tienen el apoyo, en las primarias de todo el estado no hay psicólogos que ayuden a detectar problemas de este tipo entre los estudiantes de San Luis Potosí, reveló el director de Educación Básica de la Secretaría de Educación de Gobierno del Estado (SEGE), Gaudencio Medellín Herbert.
Ante los hechos ocurridos en Torreón, Coahuila, donde un estudiante de sexto grado mató a su maestra y se suicidó, Medellín señaló que es muy difícil detectar a alumnos que tengan problemas psicológicos, ya que las escuelas primarias no cuentan con esta atención.
“El profesor junto con el padre de familia tienen que enfrentarse a los problemas emocionales de los alumnos, más los maestros porque la mayoría de primaria no son vigilados por sus padres, debido a que salen a trabajar, y muchas veces los niños son encargados a familiares, amigos y vecinos, donde se pudiera generar inconscientemente una depresión”, indicó.
Explicó que no es el caso de las escuelas secundarias del estado que sí tienen el apoyo psicológico, enfatizando que esto no indica que no vaya a pasar nada dentro de las instituciones de educación pública de nivel básico.
“Cuando detectamos a un alumno con problemas psicológicos o que refiera violencia, se canaliza al departamento de psicología con el que cuentan todas las secundarias, dejando en claro que los hechos sucedidos en el colegio de Torreón indican que debemos tomar nuevas medidas para prevenir este tipo de actitudes”, consideró Medellín.
El funcionario educativo señaló que se trabaja en una revisión de los útiles escolares (Operativo Mochila) desde el año 2017, con apoyo de los consejos escolares y precisó que en esta entidad, no hay armas de fuego detectadas a los estudiantes.
“Solamente se han encontrado cigarros y algunas veces envoltorios de marihuana”, admitió.
Gaudencio Medellín señaló que en ocasiones, los padres de familia tienen armas de fuego al alcance de los niños y jóvenes, como en el caso de Monterrey donde el joven tomó la pistola de su papá para llevar a cabo un ataque donde también el agresor se quitó la vida.
“El alumno es la parte más importante del maestro en la escuela, cuando agreden a los profesores son tratados psicológicamente, y tratamos de que se normalicen, porque no podemos echarlo a la calle ya que esto representaría un problema aun mayor para la sociedad”, finalizó.