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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 17 de junio de 2024.- En la actualidad, los corridos mexicanos recogen la historia no oficial del narcotráfico en México. Estas composiciones, centradas en las armas, drogas, mujeres y dinero, son conocidas como narcocorridos.
En los últimos años, han contado toda clase de escenas y personajes vinculados con células delictivas, populares en las historias policiales de México e incluso, con alcances a otros países.
Una realidad es que diversos artistas han sido relacionados con organizaciones criminales en México, vínculos que se vuelven noticia mediática con toda clase de trasfondo: amistades, presentaciones musicales en fiestas de personajes delictivos, vínculos de negocios, amenazas… toda una apología histórica de estos grupos cada vez más extensos y diversos en el país.
Entre los casos más conocidos se encuentra el del productor de música grupera mexicana Ángel del Villar, quien fue detenido por el FBI tras ser acusado de violar la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeras del Narcotráfico, conocida como Ley Kingpin.
Del Villar fue señalado por realizar negocios con Jesús Pérez Alvear, promotor musical de artistas como Gerardo Ortiz, vinculado con un grupo delictivo jalisciense.
De acuerdo con la información vertida por medios de comunicación nacionales, Pérez Alvear tomó un acuerdo de culpabilidad con autoridades estadounidenses, donde afirmó haber conspirado para realizar transacciones financieras con propiedades relacionadas a la organización criminal. Era titular de la promotora Gallística Diamante o Ticket Premier, designada en abril de 2018 como red financiera encargada de blanquear ingresos del citado grupo.
Aunque este caso ha sido uno de los más conocidos en todo el país, se ha escuchado sobre otros artistas relacionados con organizaciones criminales. En las redes sociales, noticiarios, revistas de espectáculos y demás plataformas, se cita y condena a grupos musicales que han hecho supuestas presentaciones musicales para delincuentes como José Manuel Figueroa, Roberto Tapia y Los Tucanes de Tijuana.
Peso Pluma
Recientemente, algunos conciertos de Peso Pluma fueron cancelados luego de que cuatro mantas presuntamente adjudicadas al CJNG aparecieron en Tijuana, Baja California, con un mensaje de muerte dirigido al cantante.
Valentín Elizalde: El Gallo de Oro
Según algunos medios de comunicación, Valentín Elizalde recibió amenazas del crimen organizado antes de ser asesinado, la razón: haber cantado un narcocorrido que causó agravio al líder de una organización criminal.
Chalino Sánchez
Chalino Sánchez fue uno de los primeros cantantes presuntamente amenazado y asesinado por el narco en México.
Durante su última presentación en Culiacán, Sinaloa, recibió un recado cuando estaba en el escenario, aunque el contenido se desconoció, hay grabaciones que lo muestran nervioso al leerlo, luego de ese hecho fue asesinado.
Sergio Vega: El Shaka
Sergio Vega fue perseguido por un grupo de hombres armados mientras circulaba a bordo de su vehículo por Los Mochis, Sinaloa.
Aunque su representante señaló que no había recibido amenazas, la atmósfera que rodeó su muerte estaba relacionada con el mundo del narco tráfico.
Continuará…