Desatada cacería furtiva en la Huasteca Potosina; Profepa ni sus luces
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 26 de noviembre de 2018. Cada mañana, como la mayoría de los católicos, los tianguistas de la ruta 16 «Ponciano Arriaga», que trabaja en varias colonias y municipios de la zona metropolitana de San Luis Potosí, se encomiendan a la Virgen de Guadalupe, para tener un buen día de ventas y llevar un sustento digno a los hogares de cada trabajador de esta organización.
Semanas previas al 12 de diciembre, las peregrinaciones a la Basílica de Guadalupe comienzan; la agrupación de vendedores, se organiza para agendar su tradicional peregrinación a donde acuden a dar gracias a la Virgen del Tepeyac, por los favores concedidos en el día a día, e incluso, algunos milagros en relación a la salud de la familia.
«Venimos por la fe que tenemos, porque para nosotros la virgen es nuestra fuerza, todos los días le damos gracias por nuestro trabajo como comerciantes y por eso cada año le hacemos su rosario y la visitamos», dijo la señora Lizeth Morales.
En el camino de la devoción, se dirigen hombres, mujeres y niños que muestran alegría por visitar a la virgen morena. Aunque la ruta 16 se compone de cerca de 300 comerciantes, únicamente pudieron acudir alrededor de 60 de ellos, pero lo hacen de corazón, aseguraron.
Por su parte, el representante de los tianguistas, Luis Manuel Murillo, señaló que para él, lo más importante de continuar con la tradición de las peregrinaciones hacia la Basílica de Guadalupe, es fomentar una cultura de paz y armonía entre los ciudadanos, sin distinciones sociales.
«La mayoría de los comerciantes somos creyentes, como la mayoría de los mexicanos, y yo creo que la devoción a la virgen más inculca el respeto por los demás, el amor al prójimo; eso le diría yo a la gente, que tratemos de ser una sociedad más pacífica en la que no haya violencia», expresó.