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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 11 de noviembre 2020.- La solicitud de coalición entre los partidos Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Verde Ecologista de México (PVEM), del Trabajo (PT) y Nueva Alianza (NA), se concretó, al igual que la del Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Conciencia Popular (PCP), para buscar con dos candidatos la gubernatura de San Luis Potosí en 2021.
En el caso de la izquierda, no fue fácil, pero lograron ingresar a tiempo la documentación ante el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (Ceepac), a pesar de los esfuerzos que realizaron personas encabezadas por la ex dirigente del Sindicato Independiente de Trabajadores y Trabajadoras del Gobierno del Estado (SITTGE), Francisca Reséndiz Lara, por reventar el acuerdo ordenado por el Comité Ejecutivo Nacional de los morenistas. De esta coalición saldrá el candidato o candidata para contender por la gubernatura.
Aunque se desconoce cuál partido sea el que lleve la preferencia para contender por el máximo cargo en el estado, es un hecho que por el PVEM la carta fuerte sería el diputado federal Ricardo Gallardo Cardona, mientras que por Morena hay varios aspirantes a la elección, sin que se vea una clara preferencia por la militancia en el estado.
Por otro lado, otra coalición que se concretó antes de la medianoche -cuando terminaba el plazo del Ceepac- fue la del PRI, PAN, PRD y Conciencia Popular. Los tres últimos elegirán a un solo candidato, mientras que el PRI propondrá uno propio, después se mediría al candidato más fuerte para que sea el abanderado de la histórica coalición entre partidos que anteriormente era opositores, mismos que al ver el crecimiento del partido que llevó a la presidencia a Andrés Manuel López Obrador, unieron esfuerzos para evitar que por primera vez un gobernador morenista sea el elegido en San Luis Potosí.
Lo que sigue es que el Ceepac dictamine si proceden ambas coaliciones.
Por su parte, un grupo de inconformes morenistas partirá a la CDMX para reclamar a su líder nacional, Mario Delgado Carrillo por lo que calificaron como una imposición.