Asesinan a operador en Matehuala tras intento de asalto
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 24 de diciembre 2020.- La delincuencia organizada existe debido al mercado que pide y busca su mercancía, misma que deriva en adicciones, fue el discurso de las autoridades presentes en la quema de más de cuatro toneladas de drogas en el municipio Armadillo de los Infante, encabezada por el representante de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en San Luis Potosí, general Guzmar Ángel González Castillo.
Con la presencia del gobernador Juan Manuel Carreras López, el fiscal general Federico Garza Herrera, el delegado de la Fiscalía General de la República (FGR), Rodolfo Hernández Limón y el secretario de Seguridad Pública, Jaime Pineda Arteaga, se llevó a cabo la destrucción de drogas incautadas durante el presente año en el parque natural del municipio mencionado.
Cerca de las 13 horas, los policías, integrantes del Ejército, Guardia Nacional y la Guardia Rural, se formaron para recibir a sus mandos. Por primera vez se vio la presencia de policías ministeriales federales, quienes coordinaron junto con el Ejército la quema de estupefacientes. Dos niños accionaron el dispositivo que inició con la quema de este veneno para la población.
La ceremonia comenzó con la recepción de la bandera mexicana, enseguida, el general Guzmar González tomó la palabra y subrayó en su discurso que las cuatro toneladas de droga que estaban por quemar eran el resultado de la coordinación muchas veces cuestionada por el público; con meses de operativos, revisiones y retenes, en alusión al combate directo de las autoridades contra los grupos de la delincuencia organizada.
Una vez que el General brindó un aplauso a todos los intervinientes en los operativos, pero en especial a los policías por su día, pidieron la presencia de dos menores, quienes al filo de las 14 horas presionaron un sencillo botón que provocó un colorido humo que sirvió de presentación para la explosión y quema de cuatro mil 364.155 kilogramos de marihuana, 28.56 kilogramos de metanfetamina, 73.729 de mezcalina, 6.20 de diacetilmorfina, de psicotrópicos 0.177, cuatro mil 500 pastillas de psicotrópicos, 991 mililitros de marihuana y 24 mililitros de sustancia negativa, dando un total de cuatro mil 474.453 kilos de drogas.
Mientras el veneno ardía, se entonó el Himno Nacional y en punto de las 14:30 horas, tomó el micrófono el mandatario potosino, Juan Manuel Carreras López. Mientras el humo se asomaba entre los cerros de Armadillo y sus vistosos paisajes, el titular del Ejecutivo estatal subrayó que la tarea no es quemar la droga, sino lo que significa su decomiso por el trabajo y la coordinación. «La clave no está en usar balas o implementar operativos para terminar con la venta y distribución de estupefacientes, sino en erradicar las adicciones», consideró.
Antes de concluir el evento, el delegado de la FGR Rodolfo Hernández Limón, dejó en claro que pese a que muchas veces ha sido cuestionada su operatividad en San Luis Potosí, el resultado de las llamas son muestra de que «sí se trabaja, los elementos ministeriales federales tienen una activa participación en los operativos conjuntos».
El Gobernador y las demás autoridades presentes se dieron el tiempo de saludar a los policías que festejaban su día, lo mismo hicieron con la naciente Guardia Nacional, a quienes les refirieron que a pesar de su corta existencia ya dan golpes duros de autoridad. Carreras también agradeció su silenciosa labor a la Guardia Rural y a la multitud de tareas que atienden los elementos del Ejército quienes siempre están a la orden del día cuando de servir al país se trata.
Con esto culminó uno de los últimos eventos grandes de seguridad del año, con la caída del sol y recorriendo los verdes cerros de Armadillo, las autoridades y prensa despidieron el escenario donde las sustancias nocivas confiscadas durante el 2020 fueron destruidas.