Javier Corral no se ha dado cuenta de que ya es deMorena
Del refranero popular:
1.- “Cuando el río suena, agua lleva” y.
2.- “Sobre advertencia no hay engaño”.
En los dos casos, las expresiones populares alertan de que siempre lleva algo verdad aquello que se pregona en la sociedad.
Y viene a cuento el tema porque, una vez que alcanzó su segundo mandato como presidente de Estados Unidos, cobran relevancia las amenazas que antes, durante y después de su campaña presidencial, lanzó Donald Trump contra las bandas criminales mexicanas.
En pocas palabras, el nuevo presidente norteamericano dijo que en su mandato perseguiría a los cárteles criminales, incluso en territorio mexicano.
Por eso, horas después de que Trump proclamó su victoria y que la señora Camala Harris reconoció su derrota, en el gobierno mexicano se prendieron los focos rojos y todas las alertas ante las amenazas de quien será el nuevo presidente de Estados Unidos.
Y es que, como “el miedo no anda en burro”, la presidenta, Claudia Sheinbaum, declaró que aquellos mexicanos que intenten que Trump declare “terroristas” a las bandas criminales mexicanas, “serán traidores a la patria”.
Peor aún, desde el Senado de la República, en “narco-senador”, Félix Salgado Macedonio, amenazó con demandar “por el delito de traición a la patria” a quienes buscan la intervención en México, de gobiernos extranjeros.
Lo cierto es que en todos los rincones de la llamada “4-T” se prendieron las alertas, porque si el nuevo gobierno estadounidense cumple su palabra de perseguir a las bandas criminales, lo primero que tendrá que hacer es perseguir a los dueños del partido Morena, que son los verdaderos jefes de las mafias
criminales en México.
¿O, a poco creen que el gobierno norteamericano no sabe que el Partido Morena nació gracias al financiamiento del crimen organizado?
¿De verdad creen que, Donald Trump, no sabe que Félix Salgado Macedonio es un “narco-senador” que convirtió a Guerrero en el principal feudo criminal del país?
¿Creen que Trump ignora que los gobiernos de AMLO y de Claudia convirtieron a México en un verdadero “narco-Estado”?
¿Creen que el nuevo mandatario estadounidense no está enterado de que todos los gobiernos estatales y municipales en manos de Morena, son “narco- gobiernos”?
Pero vamos por partes.
¿Qué fue lo que dijo Donald Trump, que tiene en pánico al gobierno mexicano y a toda la mafia llamada Partido Morena?
El 24 de julio del 2024, en una entrevista con la cadena conservadora de noticias Fox News, Donald Trump dijo que el problema del gobierno mexicano “es que está petrificado con los cárteles, que podrían quitar al presidente en dos minutos”.
Pero fue más allá cuando señaló tajante: “Los cárteles son los que administran México”, para prometer que, de llegar a La Casa Blanca, llevaría acabo la mayor operación de deportaciones de la historia de Estados Unidos.
Meses después, el 29 de octubre del 2024, en un encuentro con periodistas y simpatizantes, el entonces candidato presidencial prometió “confiscar los bienes de los cárteles de la droga mexicanos para indemnizar a las víctimas del crimen migratorio”.
Según Trump, el citado fondo de compensación a favor de las víctimas del crimen migratorio, será creado con los activos que se incauten a los cárteles de la droga y a las bandas criminales.
Pero Trump fue más allá y días antes de la elección presidencial, dijo que si México no pone freno a la migración y acaba con el tráfico de drogas, su gobierno “impondrá aranceles de importación hasta 25 por ciento y se usarán drones y militares para perseguir a las bandas del crimen organizado”, en territorio mexicano.
Frente a eso, la dirigencia del PAN, a través del Senado de la República, propuso que los gobiernos de México y Estados Unidos declaren “terrorismo” el narcotráfico y el crimen organizado. Según el partido azul, de esa manera el nuevo gobierno norteamericano podría colaborar con México para combatir la
violencia y a las bandas del crimen.
¿Y cual fue la respuesta de “la señora presidenta? Acusar de “traidores a la patria” a quienes pidan la intervención del gobierno norteamericano en México.
Y es que, en efecto, “el miedo no anda en burro”, ya que perseguir a los cárteles mexicanos de la droga y al crimen organizado, pasa por perseguir a toda la mafia del Partido Morena.
Al tiempo.