Diferencias entre un estúpido y un idiota
Ya se presentó en Palacio Nacional la iniciativa de ley que pretende no eliminar la figura del outsourcing (o subcontratación de personal) sino las malas prácticas de las mismas, al poner como eje central al servicio proporcionado y no la mercantilización de las personas, además de imponer penas en caso de incumplimientos por parte de las empresas que aun se dediquen a esta actividad pasadas las modificaciones.
Convencieron al Presidente Andrés Manuel López Obrador de no quitar de plano la subcontratación, sana en el sentido de impulsar la productividad de las empresas sin tener que contratar directamente al personal y con ello generar costos innecesarios, y en vez de ello anteponen medidas de control y penas, los mas importante, por si aún alguna empresa “vivales” quisiera burlar la ley.
Se estima que 4 millones 600 mil mexicanos están subcontratados y, con ello, vive un buen porcentaje en la oscuridad laboral al no tener aportaciones reales de su ingreso reportados en el IMSS y en consecuencia afectando sus cotizaciones para futuros usos de los diferentes seguros a los que tienen derecho en el instituto y en consecuencia una pensión digna con los años, sumado a no poder ejercer un crédito con Infonavit, entre otras grandes afectaciones. No dejemos de lado que perder el empleo de un momento a otro sin una liquidación o finiquito justo es otro de los daños del mal outsourcing.
AMLO acuso en su conferencia mañanera que las empresas outsourcing despedían por cientos de miles a los trabajadores en este esquema de contratación “sin decir agua va” cada fin de año, afectando la creación de empleos que anualmente se reportan al IMSS.
Entre las medidas contempladas está: 1. Padrón de empresas prestadoras de servicios especializados autorizadas para esas actividades cuya vigencia estará en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) cada 3 años. 2. La empresa contratante será responsable solidario en caso de incumplimiento patronal a los trabajadores. 3. Reporte trimestral al IMSS de todos sus contratos por parte de las prestadoras de servicios y reporte cuatrimestral al Infonavit. 4. Se prohíbe la deducción o acreditación fiscal de la subcontratación de personal. 5. Las actuales empresas outsourcing tendrán 6 meses para regularizarse con las nuevas normas. 6. Multa por 434 mil a empresas que operen sin autorización de la STPS. 7. Multa por 173 mil a empresas que no entreguen reportes al IMSS. 8. Multa de 150 mil a 300 mil por la omisión en la entrega de la información sobre la deducción o acreditamiento del IVA e ISR por los servicios. 9. Continúan las agencias de colocación pero no podrán contratar directamente al trabajador; sus funciones se reducirán a reclutar, seleccionar, entrenar y capacitar.
Del desagrado de los empresarios, estas propuestas serán debatidas por lo diputados en las próximas semanas y formarán parte con el tiempo de un nuevo esquema de contratación el cual hará que se lo piensen dos veces la IP a quien contrata, por los costos que esto genera, es decir, si de por si era complicado buscar trabajo, con los años será aún más; la subcontratación es un alivio presupuestal para la IP, sin duda.