Jugando con México
En política, dice el viejo refranero popular, “no hay casualidades”.
Y en política, dice otra versión del mismo refranero, “lo que parece, es”.
Y a dos años de distancia, pocos creen que se trató de un accidente la muerte trágica de la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso y de su esposo, senador del PAN, Rafael Moreno Valle.
Y pocos lo creen porque a nadie, en el Estado mexicano, le ha interesado investigar a fondo el accidente para descartar las abunantes contradicciones y, sobre todo, las posibilidades de un atentado y/o de un crimen de Estado, en su caso.
Peor aún, López Obrador nunca respondió la exigencia de la madre de Martha Erika Alonso, quien en su momento hizo pública una carta en la que exigía justicia y rechazó el proceso electoral de Puebla, que hizo gobernador a Miguel Barbosa
Eso sí, López Obrador acudió a Badiraguato para saludar de mano a la madre de “El Chapo”; madre quien le hizo llegar una carta al presidente para que ayudara a su hijo y a su familia.
Es decir, el presidete mexicano atiende el llamado de la madre del mayor criminal, pero ignora el llamado de la madre de una gobernadora que perdió la vida de manera trágica; una madre que exige justicia y que pidió no usar electoralmente la muerte de su hija.
Sin embargo, a dos años de la tragedia de Puebla, la peor noticia es que se confirma la primicia que aquí revelamos, de que por instrucción de López Obrador se detuvo la investigación sobre las causas de la tragedia del 24 de diciembre de 2018 en Puebla.
Es decir, hoy se sabe que en la Secretaría de Comunicaciones y en la Fisclía General se abandonaron las indagatorias sobre las causas que provocaron el desplome del helicóptero donde viajaban la gobernadora y su esposo, como lo revelamos en este espacio.
Más aún, otra versión no oficial señala que ex el titular de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, habría renunciado al cargo, inconforme con la decisión presidencial de no investigar lo ocurrido el 24 de diciembre de 2018 en Puebla.
Y es que, en efecto, en el Itinerario Político del 12 de junio de 2019, titulado “Por qué AMLO no investiga la tragedia de Puebla”, revelamos que una fuente de la SCT le confirmó a Itinerario Político que desde Palacio llegó a esa dependencia la orden de no seguir en la investigación del helicóptero siniestrado. Esa versión hoy es realidad.
Y nadie informará nada nuevo sobre la tragedia y menos se aclararán las abundantes dudas del caso, como por ejemplo, que no coinciden la hora que aparece en el último video donde se vio con vida a la gobernadora de Puebla, con las horas en que se habría producido la tragedia.
Lo único cierto, a dos años, es que siguen ocurriendo presuntos “accidentes” e inexplicables “crímenes políticos”, sin que nadie en el gobierno de López Obrador sea capaz de aclarar nada.
Más bien parece que la tragedia y el crimen persiguen a los mayores adversarios de López Obrador.
Por ejemplo, luego de la tragedia del 24 de diciembre de 2018 en Puebla –que como ya se dijo, costó la vida a la gobernadora y a su esposo, jefe de los senadores del PAN–, en julio de ese mismo año se desplomó el helicóptero donde solía viajar el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.
En esa tragedia perdieron la vida los pilotos y algunos de los más cercanos colaboradores del mandatario quien, curiosamente, también es un severo crítico del presidente López Obrador.
Pero, además, han pasado poco más de tres días del asesinato, por la espalda, del ex gobernador de Jalisco, Aristóteles Saldoval, en un centro nocturno de Puerto Vallarta, Jalisco, y nadie sabe nada.
Lo que si se sabe es que, por pura casualidad, el crimen del ex mandatario de Jalisco se produjo en la entidad federativa gobernada por Enrique Alfaro, quien es el adversario más frontal del presidente López Obrador.
Sí, “tres casualidades” caprichosas que pocos o nadie cree.
Al tiempo.
En el camino.
Por vacaciones, el Itinerario Político regresará en los medios y los espacios habituales el lunes 4 de enero. Felicidades a todos.