Ironía
No, el título del Itinerario Político de hoy no hace referencia a: “¿Mujeres divinas!”, esa composición clásica de Vicente Fernández.
No, en realidad hacemos referencia a un repetido discurso de la espuria Claudia Sheinbaum, quien ha recorrido el país con la cantaleta de que: “¡Es tiempo de mujeres!”.
Lo curioso del tema es que el discurso de la “Señora Presienta” se
asocia con algunas de las peores y más cuestionables prácticas de la política y que, por lo regular, involucran a varones.
Y por eso las preguntas.
¿Es tiempo de mujeres, como Claudia, que es parte del mayor fraude electoral de la historia en México?
¿Es tiempo de mujeres, haber saqueado presupuestos completos, como el del Metro de la capital, para realizar ese fraude?
¿Es tiempo de mujeres, la irresponsabilidad en la tragedia de la línea 12 del Metro?
¿Es tiempo de mujeres, la irresponsabilidad en la caída del Colegio Rébsamen?
¿Es tiempo de mujeres, que la espuria Claudia no seas más que una marioneta de López Obrador?
¿Es tiempo de mujeres, que todas las legisladoras de Morena, sigan como esclavas la destrucción de la democracia que les ordena el tirano de Palacio?
¿Es tiempo de mujeres, como Evelin Salgado, que no sea más una gobernadora títere, mangoneada por un padre abusador de mujeres?
¿Es tiempo de mujeres, que la senadora electa por el PRD, de nombre Araceli Saucedo, haya traicionado a su partido, a cambio de pingües promesas en Morena?
¿Es tiempo de mujeres que, como Tatiana Clouhtier, que por segundo gobierno consecutivo de Morena, traicionó las luchas históricas de su padre, Manuel J Clouhtier, a favor de la democracia?
¿Es tiempo de mujeres, como la ex atleta olímpica, de nombre Ana Gabriela Guevara, que se haya convertido en epítome de la corrupción del gobierno de AMLO, en su cargo en la Conade?
¿Es tiempo de mujeres, como la ex ministra, de nombre Olga Sánchez Cordero, que hoy traiciona su propio recurso legal contra la sobrerrepresentación en el Congreso?
¿Es tiempo de mujeres, como Rocío Nalhe, que al frente de la Refinería Dos Bocas, saqueo a placer el presupuesto federal, para luego convertirse en gobernadora de Veracruz, mediante otro fraude de escándalo?
¿O será que el pregonado “tiempo de las mujeres” es el tiempo de copiar las transas, raterías, mentiras, deshonestidades, desfalcos y saqueo de los políticos varones?
Y es que, si todas esas mujeres vienen de uno de los gobiernos más ladrones, mentirosos y saqueadores de la historia, ¿cuál será la diferencia?
¿Por qué tendríamos que creer que serían distintas, tanto la señora espuria, como todas las mujeres de su gobierno y de su partido?
¿O seremos tan ingenuos de seguir creyendo en milagros?
Al tiempo.