
Oposición no regatea la unidad nacional ante llegada de Trump
Cierto, no son tiempos de hacer política, sino de la campaña nacional Quédate en Casa para evitar contraer el coronavirus tipo Covid 19, pero en política no hay tiempos muertos y menos cuando estamos a cinco meses de iniciar la fase preliminar del periodo electoral 2020-2021.
Algunas encuestas han tomado en cuenta a la secretaria estatal de Salud, Mónica Liliana Rangel Martínez, como una de las potenciales candidatas a la gubernatura de San Luis Potosí. Sus números no son altos y tampoco la toman en cuenta todas las casas encuestadoras, pero es indudable que el gobernador Juan Manuel Carreras López debe tener no una, sino varias cartas y una de ellas bajo la manga, para la sucesión, sobre todo si es alguien cercano a él y de su partido, el PRI.
Rangel, médico cirujana egresada de la UNAM, enfrenta el mayor reto de su carrera en la administración pública. Si maneja bien la pandemia, será una de las posibles candidatas porque recordemos, en política el espacio que deja vacío uno, lo ocupa otro. Y en este momento, a juzgar por los resultados demoscópicos que se conocen, el único que tiene reales posibilidades de ser el abanderado del tricolor, es el secretario de Educación, Joel Ramírez Díaz.
Ambos tienen una papa caliente. Ella, en materia de salud de los potosinos; él, para que los niños no se enfermen y tome las mejores decisiones en el regreso a clases que se pretende realizar en un mes.
El PRI, un partido que tiene más vidas que un gato, por lo tanto, está vivito y coleando. Tiene en sus manos una oportunidad dorada de elevar hasta la estratósfera la imagen de sus potenciales aspirantes. El otro es el secretario de Finanzas, Daniel Pedroza Gaitán, pero a él le tocará en otro momento, cuando tenga que trabajar para reactivar la economía de San Luis Potosí, lo que conlleva la recuperación de empleos, flujo de efectivo, grandes obras públicas, compras y un largo etcétera.
Si el partido y su líder natural Juan Manuel Carreras, arman una buena estrategia y sobre todo, echan toda la carne al asador para que San Luis salga lo mejor librado de la enfermedad que tiene en jaque a todo el mundo, es posible que de estar en tercer lugar de las preferencias, pueda emparejarse con el PAN, el único partido que hasta el momento es la competencia más cercana de Morena, donde el titular de la SEP, Esteban Moctezuma Barragán, se mantiene en primer lugar desde hace meses, en caso de ser designado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los primeros ensayos de la doctora Rangel no han estado mal. Empezó debilitada por la fallida política de gobierno, al pretender dejarle toda la carga sin arroparla como era debido, por más que ella afirme que desde un principio no la dejaron sola. En todo caso, hacia afuera daba la impresión que sí, pero apretaron tuercas y la máquina gubernamental empezó a funcionar mejor.
Hoy, la construcción de su hipotética candidatura no es una idea descabellada, pero eso podría generar – como es lógico- cierto resquebrajamiento en la estructura política del gobierno, si finalmente la imagen de la doctora crece entre los potosinos y no hay un manejo político cuidadoso de este asunto.
Y conste, sería impensable que el priismo no aproveche esta oportunidad. No hay otra mejor para dejarse ver y sobre todo, sentir, al ser el partido en el poder. En manos del gobernador Carreras estará volver a una carrera electoral que parecía irremediablemente perdida contra Morena, un partido que hoy luce ausente en la entidad.