La Pica

En el lamentable caso de la maestra que fue encontrada muerta en la colonia Las Piedras, habrá que preguntarse en qué quedó el famoso convenio de colaboración que tanto presumió la fiscalía de Federico Garza Herrera con la plataforma de servicio de transporte particular, Uber.

Y es que según el abogado del estado, gracias a este acuerdo los delincuentes iban a caer como moscas a sus redes, cosa que no sucedió.

No solamente eso, según las versiones extraoficiales, la joven docente de 24 años de edad abordó un vehículo dado de alta en Uber y luego no se volvió a saber nada de ella.

Si en efecto, Garza Herrera tiene vínculos con la polémica plataforma, los resultados debieron ser inmediatos, sobre todo porque ahora muchos de sus conductores, se supone están registrados ante la SCT.

Prueba de fuego para Uber, sus directivos fantasma y el propio fiscal general.

Pues vaya que causó revuelo el acuerdo político entre Ricardo Gallardo Cardona y el experimentado Héctor Serrano Cortés, para apuntalar el futuro político inmediato del experredista, quien todo mundo sabe, quiere y va por la candidatura a gobernador de San Luis Potosí.

Serrano no es un político que se ande por las ramas y está a punto de venir a San Luis Potosí para empezar a armar todo el entramado para 2021.

Por ahí se supo que dos que tres políticos locales se pusieron algo nerviosos, amén que los morenistas cargan baterías para poderlo enfrentar, cosa que se duda mucho, porque están más divididos que nunca.

Esperen noticias.

Tómenlo con reserva, pero afirman que María de Jesús Almendárez Prieto anda tendida en otra protesta para que asciendan a su hijo de escalafón en el Indepi.

Actualmente, su retoño cobra 22 mil pesos mensuales, pero va por 35 mil, lo que significa que deberá subir de golpe y porrazo, del nivel 4 que tiene actualmente, al 12.

Por eso está en plantón frente a las oficinas de la CEAV, donde su titular Jorge Vega Arroyo no está acostumbrado a ver estas escenitas. Le dicen, sin embargo, que ya están por terminarse las vacaciones de Almendárez y va a tener que ponerse a trabajar.

Marichuy, la misma que logró justicia por sufrir acoso sexual en la Seduvop, parece que ahora tiene como modus vivendi la presión a las autoridades para conseguir sus propósitos familiares.