Preparativos para una amenaza llamada Trump
Quien se acordó que trabaja como delegado del CEN del PRI en San Luis Potosí, es Julián Luzanilla Contreras, para criticar la salida de José Narro Robles del partido y su renuncia a la candidatura por la presidencia nacional del mismo.
La verdad es que Luzanilla ha pasado de noche, sin poder llenar los zapatos del finado Jorge Schiaffino y aunque ya tiene un año en el cargo, no se ve que levante al tricolor y menos que resuelva aspectos señalados por el propio Narro, como la verificación del padrón y el empadronamiento en sí mismo.
Procedente de Tamaulipas, donde ocupó la misma cartera política, Luzanilla quedó a deber en las pasadas elecciones, así que antes de afirmar que de Narro, “no comparto sus expresiones”, sería bueno un ejercicio de autocrítica.
A menos que el doctor se haya equivocado en el diagnóstico y el PRI goce de cabal salud.
No cabe duda que la amnesia en política es muy socorrida para evitar cuestionamientos.
Es el caso del director de Obras Públicas del ayuntamiento de la capital, Marco Antonio Uribe Ávila, quien en sus tiempos de presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, era un duro crítico de los baches en la ciudad.
Pero llegó al gobierno navista con todo y la pérdida de memoria.
Y es que no puede explicarse de otra forma que ahora, como encargado de resolver este molesto problema, diga que son algo “natural”.
¡A lo mejor lo dice porque retoñan en todos lados!
Recién desempacada como delegada del INM, Yolanda Camacho Zapata enfrenta su primera crisis con la Estación Migratoria que nadie termina de explicar cómo funcionará y sobre todo, su ubicación.
La flamante funcionaria federal trabaja a marchas forzadas en la conformación del plan potosino para entregarlo a su superior, Francisco Garduño, nombrado en días pasados por el presidente Andrés Manuel López Obrador para dirigir esta política en el país.
El problema es que los habitantes están nerviosos y desinformados, el tiempo apremia y la presión social también.
Sin duda, un duro paquete.