La Pica

A nadie debe extrañar que la diputada local, Sonia Mendoza Díaz, haya declinado por Xavier Nava Palacios en la elección interna de Acción Nacional, por dos razones: tiene tiempo decantada -y encantada- por el alcalde capitalino con licencia y, se ha mostrado muy incongruente.

Su actuación más clara fue en el Congreso del Estado, donde la también exsenadora votó a favor de que Nava no fuera a juicio político por la violencia de género ejercida en contra de la exoficial del Registro Civil, Teresa Carrizales Hernández, a quien el ayuntamiento le ofreció solo una disculpa pública.

El voto de quien debería defender el derecho de las mujeres, fue para su nuevo mejor amigo, no de Carrizales. Ahora, sin ningún rubor, se dice víctima de violencia política en el PAN.

Pero en el fondo se observa un realidad: por Mendoza ya no votaba ni su familia, y con este auténtico revire de la otrora candidata a gobernadora en 2015, que se quedó a pocos sufragios del gobernador Juan Manuel Carreras López, queda claro que más que ganar, Nava perdió otro bonche de votos en la elección interna.

A esto hay que sumar que el PRD de Jesús Zambrano Grijalva anda de metiche en la vida interna del blanquiazul, con su pronunciamiento a favor de Nava, lo que molestó a militantes. Y que todavía se dieron el lujo de embarrar al PRI, con una fake news.

En medio de las dificultades por el Covid 19 en San Luis Potosí, cientos de paisanos de la huasteca potosina hicieron su arribo en caravanas desde Estados Unidos.

Si bien no está restringido el paso a México, llama la atención que el Instituto de Migración y Enlace Internacional (IMEI), a cargo de Enrique Malacara Martínez, no haya implementado un operativo sanitario de bienvenida.

En días pasados, el vocero del Comité Estatal para la Seguridad en Salud, Miguel Lutzow Steiner, advirtió que la entidad corre el riesgo de una «súper propagación» del virus este fin de año, porque EE. UU. es el país con la mayor cantidad de contagios del mundo y justo desde ahí, llegaron los migrantes este fin de semana, sobre todo a la zona sur de la citada región potosina.

Esto muestra, una vez más, que no solo los ciudadanos tienen la culpa de que SLP esté empantanado en el color naranja epidemiológico desde hace mucho tiempo, sino que las propias autoridades se contagiaron de descoordinación.

Antes de dejar el cargo en la SEP, para irse como embajador a Estados Unidos, Esteban Moctezuma Barragán paró en seco a San Luis y otras entidades donde las escuelas privadas presionan para que haya un regreso a clases semipresencial.

«(El educativo) fuimos primer sector que salió a esta distancia social y seremos el último en regresar», reiteró el otrora primer lugar en las encuestas para gobernador de este estado.

Llama la atención que la SEGE haya salido a decir que sí están tomando en cuenta esta petición, cuando desde un principio se dijo desde la 4T que solo en semáforo verde y si así lo juzgaban pertinente los estados, los estudiantes volverían a las aulas, pero nadie se ha atrevido a dar ese paso, ni siquiera Campeche, la única entidad con semanas en ese color.

«¿Me repite la clase maestro?», parecen decir en San Luis, donde la lección del coronavirus no ha sido aprendida.