Ironía
Bonito Gabinete de Seguridad el del gobernador Juan Manuel Carreras López, que en vez de salir a dar la cara, dejó que el propio mandatario diera las explicaciones sobre los ataques a bares del fin de semana, que dejaron un saldo de cuatro muertos y siete heridos en distintos hospitales.
El tema no es menor, ya que en vez de tranquilizar a la población, los funcionarios públicos encargados de atender de forma directa este problema, prefirieron la política del avestruz. Es el caso del secretario de Seguridad Pública, Jaime Pineda Arteaga, del general Guzmar Ángel González Castillo, titular de la XII Zona Militar y del director de la Policía Municipal, Édgar Jiménez Arcadia, entre otros.
Lo cierto es que más allá de los discursos del presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre la eficiencia de las Mesas de Seguridad por la Paz, en los hechos los resultados son muy flojos en materia de combate a la inseguridad pública, al menos en San Luis Potosí.
Sobre todo, y esto hay que tomarlo muy en cuenta, no funciona nada contra el crimen organizado, que opera a sus anchas en todo el estado, lo que el propio Carreras admitió que le preocupa.
En medio de los sobresaltos de seguridad que padecen SLP y otros estados de la República, ha causado mucha expectativa la reaparición de la potosina Rosa Icela Rodríguez Velázquez, nombrada como Secretaria de Seguridad y Participación Ciudadana por el presidente López Obrador, desde el pasado 3 de noviembre.
Luego de un largo tiempo de recuperación por el Covid 19 -quizá unas vacacaciones añadidas también, porque lo que sigue consumirá todo su tiempo-, la funcionaria retuiteó una foto de ella con el mandatario mexicano: «Agradecida con la vida y con usted por su confianza», al tiempo que el tabasqueño señaló: «Me dio mucho gusto platicar con Rosa Icela Rodríguez y verla sana, recuperada de #COVID19».
De lo anterior se desprende que, en efecto, Rosa Icela está lista para enfrentar el mayor reto de su carrera pública, ya que el Presidente tiene cuidado, aunque no use cubrebocas, de reunirse con personas que hayan pasado la prueba del coronavirus. Así que apúntele, se apersonará mañana o a más tardar la próxima semana en la conferencia mañanera, para rendir el informe de seguridad que suele desarrollarse el segundo o tercer miércoles de cada mes. Y lo hará como coordinadora del Gabinete de Seguridad.
¿Habrá un golpe de timón?… o más de lo mismo que dejó su antecesor Alfonso Durazo Montaño, precandidato de Morena a gobernador de Sonora.
Cómo serán de incongruentes en Morena, que ahora quieren poner a pelear a la Iglesia católica con el presidente López Obrador, porque dizque hay intromisión en las elecciones de 2021 a favor de la coalición Sí por San Luis.
Es cierto que el sacerdote Juan Jesús Priego Rivera, dijo que este acuerdo político tiene como propósito ganar la gubernatura y hacerle frente a lo que llamó, «abusos» de AMLO, familiares y amigos, así como «equilibrar el exagerado poder» que tiene el mandatario, pero que el partido guinda quiera quemar en leña verde al vocero de la Arquidiócesis, demuestra incapacidad para convencer a los votantes o simples ganas de erigirse en Santa Inquisición.
A lo mejor el presidente estatal morenista Sergio Serrano Soriano y sus huestes, se olvidaron de las buenas relaciones de AMLO con el clero, tan es así que fue un sacerdote, el ex cardenal Norberto Rivera, quien lo sentó con el papa Francisco en Roma hace cinco años. Y hasta la fecha, no hay ruptura, sino al contrario: defensa de batallas religiosas, como el no aborto y las bodas entre personas del mismo sexo, por citar dos.
Cuidado, en una de esas López Obrador le muestra a Soriano el Detente, ya ven que siempre lo porta en su cartera.