Esquiroles de oposición, apoyan a Morena
Para como está la situación de candente en materia de crímenes, se ve difícil que Estados Unidos le quite a San Luis Potosí la alerta de viaje por inseguro.
Según las autoridades estatales o al menos eso dijo el secretario de Seguridad Pública, Jaime Pineda Arteaga, una de las peticiones al embajador Christopher Landau, en su reciente visita al estado, fue precisamente esa, pero apenas se fue el diplomático y las armas de fuego no terminan de escupir sus balas.
Tan solo el fin de semana se acumularon dos decenas de muertos, seis de ellos en los límites de Vanegas con Zacatecas, desde donde «traen los cadáveres», según el secretario de Gobierno, Alejandro Leal Tovías.
Que se sepa, la Fiscalía de Federico Garza Herrera no ha dicho que esos cuerpos estén identificados -y muchos otros que según organizaciones civiles se les pierden-, pero Leal quiso sacudirse la presión con un argumento que puede ser válido, si estuviera comprobado.
Por lo pronto, Landau presumió en su cuenta de Twitter que alguien le hizo llegar una caja completa de tunas a su esposa Caroline Landau, fruta que nunca había probado, pero le encantó. Y añadió: «¿Un nuevo producto agrícola para exportación a Estados Unidos?».
Al menos, no toda es mala publicidad para el estado.
Tan opaco es el poder Judicial potosino, que en su página de internet no aparece el listado completo de los magistrados numerarios actuales (15) y menos el de los supernumerarios.
El dato viene a cuento, porque se supone que entre hoy y mañana, el gobernador Juan Manuel Carreras López debería enviar ocho ternas para ocupar igual cantidad de espacios disponibles en el Supremo Tribunal de Justicia del Estado (STJE), luego que los diputados locales determinaron no prolongar el periodo de seis de ellos, sumados a dos que se van por término de periodo y jubilación.
Primero, habrá que ver si Carreras envía las ternas y dos, qué nombres contienen. En caso que no todos los propuestos procedan o ninguno, los supernumerarios entrarán al quite como numerarios, por escalafón.
A diferencia, sin embargo, de lo que ocurre en los poderes Ejecutivo y Legislativo, donde los ciudadanos tienen la posibilidad de conocer nombres y trayectorias -aun cuando el gobernador tiene la facultad de nombrar a su Gabinete, mientras los legisladores son electos en las urnas-, en el STJE, nunca se sabe públicamente quiénes son los encargados de impartir la justicia.
Tersas, así fueron las aprobaciones a los métodos de selección de candidatos tanto en el PRI como en el PAN, los dos primeros partidos de nueve con posibilidades de competir en 2021, por cargos de elección popular en San Luis Potosí.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), determinó dos vías: la convención de delegados y la comisión para la postulación de candidatos.
Por su parte, Acción Nacional decidió que preguntará a más de sus siete mil militantes a quiénes eligen. ¿Qué tanta ventaja podría tener Xavier Nava Palacios con la selección del candidato del PAN por consulta a la base? No se sabe, pero esto no significa que un no panista, como es su caso, sea finalmente el elegido.
En el PRI no habrá mayor problema, dado que parecen volver a las aspiraciones caras y trayectorias conocidas, todos tricolores. Es decir, se descartan sorpresas externas.
Lo que podría cambiar el panorama, sin embargo, serán las alianzas y las coaliciones, y en este momento, ningún partido, ni siquiera Morena, se ha cerrado a tales posibilidades, dado que San Luis será un estado competido, donde la mayoría no tiene definido su voto partidista, según arrojan las encuestas. Será la elección de los indecisos, los principales a convencer por los candidatos.