La Pica

Hoy, hoy, hoy, la Guardia Nacional recibirá unas instalaciones provisionales en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, pero aunque en el evento de entrega todo será felicidad, los amolados fueron los policías municipales.

Sin decirles “agua va” -como sucedió en la delegación de Villa de Pozos de la capital potosina-, una noche les dijeron a los uniformados que tomaran sus cosas para dejar el espacio a los militares de López Obrador y los sacaron de patitas a la calle.

El caso es que la GN operará desde la colonia Cactus, porque ya urge que se ponga a trabajar.

Pero, fue tiro con banda, ya que no solamente dispusieron de ese espacio, sino que les construirán el propio en los terrenos de una telesecundaria que el alcalde Gilberto Hernández Villafuerte ya había prometido a los vecinos.

Sobresaltos de la Cuarta Transformación.

Donde la cosa está que arde, bueno, cuándo no, es en la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado.

Resulta que los jefazos de las bancadas, que desde ese órgano dirigen los destinos del poder Legislativo, tuvieron a bien solicitar que los auditen, pero para diputados como Edgardo Hernández Contreras, eso es «pura simulación”.

Y cómo no, si lo mismo pasó cuando estaba al mando el morenista Edson Quintanar Sánchez y es momento que la Comisión de Vigilancia, con mano temblorosa, no termina de emitir su dictamen, porque en la Jucopo no les gustó cómo cuadraron los números.

Ni a melón supieron a ciertos policías, las nuevas patrullas que les entregó el alcalde Xavier Nava Palacios.

Y es que durante un recorrido de vigilancia, en la nada blandita Ciudad 2000, las unidades recibieron algunos balazos.

Esa colonia es uno de los focos rojos de la capital potosina en cuestión de vandalismo y narcomenudeo, por lo que ya urge implementar una estrategia.

Al parecer, mejores equipos, salarios más elevados y patrullas nuevas no significan nada para la delincuencia.