Preparativos para una amenaza llamada Trump
Un agradecimiento muy especial al Maestro Enrique Galindo Ceballos por permitirnos compartir nuestra experiencia profesional la cual ya suma 25 años dentro del ámbito de la producción de eventos empresariales y artísticos, así como llevar el trabajo de mánager personal de grandes celebridades en Latinoamérica. Esa visión de fomentar la cultura en todas sus expresiones, artísticas, deportivas, sociales y familiares es lo que nosotros los potosinos necesitamos compartir y fomentar para las nuevas generaciones… Recordando esos grandes personajes que nos dejan en vida, pero nos heredan un legado cultural; dedico esta columna a mi gran amigo y tutor del periodismo especializado, el gran “Bob Logar” que llegó a desayunar con Marilyn Monroe y estar presente en el último concierto en vivo de The Beatles en 1969, su trabajo en compartir la vida de los famosos y el trabajo de los mismos se volvió un ícono nacional, gran ser humano del cual aprendí mucho y comencé a conocer a muchas celebridades, éste mes cumple dos años de su partida mi querido amigo Roberto López García… Un suceso triste, nos deja el famoso “Requinto de Oro” el maestro “Chamín Correa”, quien fuera fundador del trío musical Los Tres Caballeros junto a Roberto Cantoral y Leonel Gálvez, dejando una huella indeleble de la época dorada de los tríos, aún conservo un disco que me obsequió producto de una edición especial de Fundación Carlos Slim… Cabe mencionar haciendo énfasis en la cultura que impera en nuestra sociedad, no todo es música, pintura, escultura, deporte, sino también “valores familiares”, vamos en aumento en la intolerancia, la violencia, la falta de respeto, y la escasa lectura y ortografía; dónde quedó ese espíritu mexicano de unidad, de crecer como nación positiva gracias a sus ciudadanos; somos ejemplo en muchos países de Latinoamérica, quiero ejemplificar con un suceso donde la inmadurez del manejo de redes sociales y los efectos negativos acaban incluso con las personas. Mi gran amigo Armando Vega Gil de la banda de Rock Botellita de Jerez, siendo acusado por abuso y acoso sin fundamentos ni pruebas, sólo lo señalaron para que explotaran las redes sociales en su contra, un activista de la cultura musical para niños, padre de familia, fue tanta la violencia cibernética que se extendió hacia su hijo, por ese gran amor a su progenitor para que tuviera una vida normal, se quitó la vida; nunca hubo más explicaciones ni aparecieron las pruebas y el post fue borrado, sus últimas letras en su cuenta de Twitter fueron: No se culpe a nadie de mi muerte: es un suicidio, una decisión voluntaria, consciente, libre y personal. #MeeToMusicosMexicanos. Armando aseguró antes de morir que la denuncia era completamente falsa. “Uno de mis oficios más importantes es escribir y cantar para chicos, además, soy padre de familia. Siempre me he esforzado por la defensa a los derechos universales de los niños, estoy en contra de su explotación y maltrato”. Aunque el bajista de Botellita de Jerez reconoció que quien lanzó la acusación está en todo el derecho de hacerlo, que lo haya señalado a él puso en entredicho su carrera. “Es un hecho que perderé mis trabajos, pues todos ellos se construyen sobre mi credibilidad pública. Mi vida está detenida, no hay salida. Sé que en redes no tengo manera de abogar por mí, cualquier cosa que diga será usada en mi contra”. El músico lamentó el daño que su suicidio le causará a su hijo. “Debo aclarar que mi muerte no es una confesión de culpabilidad, todo lo contrario, es una radical declaración de inocencia; sólo quiero dejar limpio el camino que transite mi hijo en el futuro. Su orfandad es una manera terrible de violentarlo, pero más vale un final terrible que un terror sin final. La única salida que veo frente a mí es la del suicidio, así que me decido por ella”. Escríbeme a mi correo [email protected] o en Facebook: DavidAlvarezProductor.