El gran vendedor de humo

Primero hay que aclarar que esto no tiene nada que ver con la industria tabacalera.

OK eso fue un mal chiste.

Lo que no es gracioso es que tengamos una autoridad elegida por los ciudadanos en mayoría Y que se haya dado a la tarea de crear una serie de justificaciones para sus logros a medias. Justificaciones con bombo y platillo. Pero más huecas que un cascarón vacío.

Que esta autoridad utilice recursos públicos para publicitar dichos logros Como alcanzados y concluidos cuando ni siquiera tienen por dónde empezar. Cuando incluso han resultado más costosos de lo que estaban programados.Cuando ni siquiera tenían pensado llegar a buen término con las consecuencias de sus acciones.

El gobierno de la República mexicana compuesto por el sistema ideológico auto denominado “la cuarta transformación” tiene mucho más que una pata de palo. Tiene una enorme y larga nariz, una lengua salaz y resbaladiza, un sistema engañabobos de espejos y un enorme grupo de seguidores ansiosos por creer que lo hecho y dicho es real. Este sistema, que es la base del populismo en América Latina, está funcionando desde antes de que el presidente Andrés Manuel López Obrador fuera elegido para el puesto hace cuatro años. Todas sus promesas que han quedado inconclusas y los únicos verdaderos logros que solo sirven para nutrir el mencionado populismo, le han dado la suficiente fuerza para poder hacer, frente a los ojos de todo el mundo, un castillo en el aire y que aun haya gente dispuesta a vivir dentro de él.

La inauguración de dos bocas la refinería de Tabasco sin capacidad de producción todavía es por lo menos un ejemplo de todo esto. El aeropuerto Internacional Felipe Ángeles carente de vuelos, la lucha contra la corrupción mientras incluye en su gabinete a corruptos de talla mayúscula como Manuel Bartlett, la nefasta estrategia de abrazos no balazos, la liberación de Ovidio Guzmán y el retiro de las tropas de Culiacán, tres años sin tratamiento para el cáncer a niños y enfermos, las malogradas encuestas para la revocación y el enjuiciamiento a los expresidentes si ningún sustento legal, etc. son muestras de que desde su tribuna incisiva y terca ha colocado una escenografía tan falsa que cualquier ojo no entrenado puede detectar y solo el infantil e ingenuo ignorante voluntario se traga.

Y todos sabemos que en las urnas del 2024 veremos a sus defensores apoyando todas estas perversas victorias falaces que nuestro presidente está dispuesto a defender a grito pelado mientras ofende y difama a quienes señalan su engaño masivo.

Es insostenible y aún así se sostiene. La cuarta transformación está compuesta en su gran mayoría de una inercia impulsada por la ingenuidad masiva y los rencores de una generación definitivamente dispuesta a castigar a la política mexicana. Este monero solo le queda prender una que otra veladora para que en su próximo castigo la sociedad mexicana, además de incluir a los partidos políticos que se han dado por señalar cómo la oposición culpable d todos los males de nuestro país, es decir el PRI, el PAN, el PRD, se incluya ya a MORENA, al Verde Ecologista y a Movimiento Ciudadano por las recientes atrocidades que hemos vivido. Claro, ya sé, eso prácticamente nos deja sin un sistema político electoral. Pero eso es lo que nos ganamos todos los mexicanos que nos valió sorbete lo que estaba sucediendo mientras estábamos tan campantes. O creyentes, en el caso de los que aun apoyan a la 4T. A ver ahora cómo arreglamos esto.