Oposición no regatea la unidad nacional ante llegada de Trump
Esta semana se han difundido espectaculares imágenes de una de las coronas del Sol. La sonda enviada ha permitido conocer información sobre vientos solares y temperaturas externas al astro; se invoca a develar los secretos solares (https://www.nature.com/articles/d41586-019-03665-3). La sonda es conocida como Parker Solar Probe, PSP.
Esta odisea espacial no tiene parangón; un artefacto humano para monitoreo del Sol, estrella que cuenta con condiciones por demás extremas como temperaturas de 6 millones en la escala de Kelvin -para referencia, cero centígrados son apenas 273 Kelvin-, vientos solares e intensos campos magnéticos.
Estos resultados publicados apenas el próximo pasado miércoles, son sólo el principio. Desde ahora y hasta 2025 esperamos grandes sorpresas en información e imágenes.
En contraste, Nuestro país ha anunciado el lanzamiento del nanosatélite AztecSat-1; luego de dos años. Este artefacto se liberará en órbita desde la estación espacial uinternacional para probar tecnología de interconexión. La nota tomo espacio en diversos medios locales y nacionales.
La diferencia entre ambos artefactos es ilustrativa de alcances, inversión, conclusiones y resultados que la ciencia mundial tiene enfocados y así México.
La sonda solar implicó presupuesto y participación multidisciplinaria; automatización, TICs, física y demás. Un gran proyecto.
El nanosatélite ha sido desarrollado por la UPAEP, con el acompañamiento de la NASA; eso informó la Agencia Espacial Mexicana, AEM, la Universidad Autónoma de Chihuahua y el Cúster MX Space. El esfuerzo es loable, lo celebro sinceramente.
No obstante, con la mirada fría, es sólo un esfuerzo. Formará recursos humanos y traerá algunos beneficios, pero serán muy marginales. Además, que el esfuerzo luce aislado pese la colaboración de la NASA. No hay prospectivas notificadas.
Es decir, ya se ha anunciado que en 2020 la Agencia Espacial Europea lanzará una misión para orbitar el Sol, aunque no estará tan cercano como PSP, la misión europea contará con muchos mas instrumentos científicos y de monitoreo. Más aun, la información será combinada con PSP para develar información clave del Sol.
Entretanto, no hay un programa de ese tamaño ni expectativa, ni por mucho, en las políticas públicas de México. Entiendo y comparto que se debe atender a sectores vulnerables, pero no es mutuamente excluyente sino por definición de la política pública y la asignación de recursos para ejercer.
Cabe apuntar que, en todo caso, no sólo es el recurso público sino también el privado con destino y alcances chatos.
Dicho lo anterior, deseo señalar que la industria de satélites pequeños no es despreciable, ni por mucho. Para la industria espacial, el segmento de satélites pequeños se proyecta a más de $4 mil millones dólares.
De haber una política pública clara podría detonarse, como resultado del AztecSat-1 y mas proyectos como ese, la creación de compañías con potencial de generar miles de trabajos en México.
La AEM hace milagros con lo marginal de su recurso y plataforma dentro del sector que tiene la SCT. Mientras no se reconozca, se presupueste un programa de gran aliento, de altos vuelos, seguiremos diciendo que hay de satélites a satélites.