Preparativos para una amenaza llamada Trump
A nivel mundial hay preocupaciones que cimientan preguntas y retos para la Ciencia, Tecnología e Innovación, CTI.
Una de esas, emparejada a enorme reto, concierne al colapso global por la potencial extinción de insectos polinizadores como abejas, abejorros y mas.
Diversas ramas de conocimiento y educación se enfocan en evolucionar como CTI para proponer soluciones que van desde la corrección y remediación hasta la sustitución.
La correctiva reducción del uso intensivo de pesticidas es una acción ya que tales químicos se indician como causantes en la disminución población de abejas; pero considerar estas acciones normativas como aisladas y únicas es insuficiente.
Se requieren además acciones como la remediación, donde, complementariamente, se hayan alternativas estructurales como reinserción de polinizadores en su hábitat natural, con el riesgo de competencia por especies invasoras y agresivas, como las llamadas abejas africanas.
Para atenuar la presencia de especies invasoras se han planteado estrategias genéticas para reducir la agresividad de organismos o, incluso, para impedir su reproducción; también resulta que esta clase de estrategias, cuando son usadas como alternativas únicas, pueden abrir consecuencias insospechadas e indeseables, como que la reproducción afectada sea sobre los polinizadores y no sobre los invasores, por citar un caso.
En lo referente a la sustitución, la micro-robótica explora la inserción o intervención de abejas artificiales; aunque aún no se han reportado implementaciones ni intervenciones en ecosistemas abiertos.
Los retos en abejas robóticas yacen, entre otros, en la adherencia de polen, toda vez que algunos fenómenos de fuerzas superficiales y electroestáticas aún no están comprendidos del todo; una pregunta subyacente es ¿cómo se logra la adherencia de distintas fuentes de polen desde diferentes especies vegetales?
La pregunta anterior es relevante para replicar los mecanismos en los insectos polinizadores artificiales, pero no es el único reto de la CTI; además está el uso de la energía, las abejas vuelan cientos de kilómetros de ida y vuelta al panal con su preciada carga, las abejas robot están lejos de trasladarse tales distancias en ciclos de trabajo diarios aunado a la defensa del panal y otras actividades intrínsecas de la vida, todas consumen energía.
Como se ha esbozado arriba, ninguna de estas soluciones, u otras ausentes aquí por limitación de espacio, podrá resolver el colapso si es impulsada de manera aislada, excluyente.
Sin embargo, el estudio de la interacción de las soluciones es así mismo un reto científico, dada la complejidad de las interacciones en ecosistemas abiertos.
Por ejemplo, por citar un grado de complicación de origen antropogénico, está la presencia de microplásticos en cuerpos de agua, hecho que cada vez se reporta de mayor impacto por riego; ¿cómo es que tales agentes poliméricos pueden afectar la interacción de fuerzas superficiales y electrostáticas y, de ahí, a la adherencia de polen en abejas vivas o robóticas?
Las tentaciones de mentes obtusas focalizan los actos normativos de manera exclusiva, como la prohibición en el uso de pesticidas o agroquímicos, a la vez que dejan fuera el financiamiento de investigaciones científicas holísticas; mismas que deberían incluir factores como suficiencia alimentaria y mucho mas.
Este es el caso del CONACYT actual, cuyas políticas públicas en CTI son autolimitadas, por incapacidad cognitiva, administrativa y de oficio político.
CONACYT está empeñado en reformar la ley en la materia para imponer una ley general; y por ese carácter de alcance en todo el territorio nacional y todo nivel de gobierno; sin visualizar, por citar lo mas obvio, los alcances presupuestales, no hay incremento presupuestal público con afectación sobre la estructura actual que, aunque perfectible, es funcional para distintos requerimientos regionales.
¿La composición legislativa y judicial actual podrá detener tal disparate normativo en CTI?