
El uso del pasado
El debate sobre las elecciones de la llamada CDMX del próximo año no es un asunto menor. Estamos hablando de un territorio donde vive uno de cada seis mexicanos. Es la ciudad más grande de Latinoamérica y, por tanto, quien sea electo resulta relevante no solo para los electores chilangos y sus familias, sino también para el país e incluso a nivel internacional. Las tendencias políticas actuales desafortunadamente se centran en un solo partido: MORENA (por supuesto). Entre los aspirantes que se han presentado como posibles candidatos para dicha demarcación, tenemos a una alcaldesa con licencia, Clara Brugada; el dirigente del partido, Mario Delgado, alias El Sapo; el ex subsecretario de salud y responsable nacional de los esfuerzos contra la pandemia, Hugo López Gatell; y el ex jefe de la policía, Omar García Harfuch.
En los ridículos y poco decorosos movimientos internos de MORENA, comienzan a lanzarse golpes bajos y patadas con la falta de pulcritud que los caracteriza. Es de conocimiento público que el elegido por la propia Claudia Sheinbaum (quien deja hoy ese cargo) es Omar García Harfuch. Por ello, Alejandro Encinas, importante político en el ámbito de persecución del delito, especialmente relacionado con el caso de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos en Ayotzinapan, libera información vital sobre el currículum del propio ex jefe de la policía, dejándolo en una situación comprometedora. En esta información se revela que este personaje estuvo involucrado en el comité que creó la mentira conocida como «la verdad histórica» sobre dicho caso, lo cual lo pone en una situación muy delicada.
En términos de muertes, el doctor López supera ampliamente al detective, además, no gana mucho con esta exhibida para Omar García. Clara Brugada generalmente no se involucra en maniobras tan sucias, por lo que no es difícil adivinar que quien se beneficia más de este golpe es Mario Delgado, lo cual lo convierte en el principal sospechoso. Pero el asunto no se limita a quién sale beneficiado, sino que un tercero resulta perjudicado, y en este caso, quien está relacionada con el balanceado hijo de la actriz María Sorté, Omar García Harfuch, no es otro que Claudia Sheinbaum.
Tal vez este golpe no le quite un cabello en la cabeza a la marioneta búlgara, pero este monero se frota las manos con anticipación como una mosca que está a punto de devorar un trozo de porquería, pensando en que tal vez estas demostraciones de afecto fraternal con puñales en la espalda convenzan a sus crédulos seguidores de la verdadera naturaleza de MORENA y se pueda avanzar hacia un sistema un poco más democrático y equitativo.
No concluyo este pequeño texto sin antes recordar a los lectores que el saldo oficial de la pandemia es de 630,000 muertos (cuando no se habla de las cifras reales pero extraoficiales) que conservadoramente elevan el número a un millón. De esa cantidad se puede determinar un porcentaje de personas que podrían haber sobrevivido de no ser por las negligencias del peje, el doctor muerte y su equipo absurdo y corrupto de funcionarios del sector salud. Realmente, al comparar los números de muertes entre ambos políticos de la 4T, la diferencia es abrumadora, pero esto debe ser una advertencia importante para cada votante registrado en la CDMX.