Exige Marko Cortés a Felipe Calderón explicación sobre Genaro García
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 13 de octubre 2020.- El presidente honorario de la Red Nacional de Consejos Ciudadanos de México y presidente de Confianza e Impulso Ciudadano, A.C., Luis Wertman Zaslav, afirma que se puede influir en los principales problemas de las grandes capitales del mundo: movilidad, consumo y cuidado de los recursos.
En su artículo «Adaptarnos para crecer», publicado en el diario Reforma, Wertman Zaslav señala que es en estos problemas conde se puede influir para cambiar las condiciones en las que se desarrolla la población.
Ante la pandemia de Covid 19, el especialista en temas de participación ciudadana, prevención, seguridad y procuración de justicia señaló que adoptar y adaptarse al uso de la bicicleta será esencial para desahogar avenidas, circuitos, periférico y calles principales, del tráfico vehicular.
«Si la Ciudad fuera un cuerpo, estaría a un paso de una esclerosis fulminante por la obstrucción constante de venas y arterias, en este caso, transitadas por cientos de miles de vehículos», describió.
Añadió que durante la pandemia ha quedado demostrado que existe espacio para más kilómetros de ciclovías, con la ventaja de que las distancias a recorrer pueden realizarse en medios de transportes individuales, no contaminantes y que además ayudan a realizar la mínima actividad física para mantener la salud, junto a una dieta balanceada.
Esto a su vez puede incidir en el consumo, pues señaló que ha quedado demostrado que la economía de una ciudad se fortalece gracias a la presencia de ciclistas y peatones que se detienen para comprar en los comercios de barrios.
Ilustró esta situación con casos de París y Nueva York, en donde se detuvo la caída de la industria restaurantera y del comercio en pequeño, debido a que se comenzó a utilizar los espacios reservados para los automóviles y se tomó parte de las banquetas.
Wertman Zaslav explicó que este no es el único aspecto del consumo, ya que pueden aprovecharse los metros cuadrados ociosos existentes en azoteas, terrazas, balcones, áreas comunes, jardines y jardines, para sembrar alimentos que complementen y apoyen al gasto de las familias.
«El autocultivo, a la par del plan oficial de reforestación, podría generar miles de toneladas de alimentos frescos en medio de la crisis económica mundial más severa en 100 años», abunda en su colaboración.
Debido a que existen técnicas y métodos para llevar a cabo este plan, el especialista indicó que sólo hace falta convencer a la ciudadanía de la Ciudad de México para que comience a sembrar alimentos desde sus casas, ya que también representa un área de oportunidad para apoyar a los productores de la capital del país.
Esto también trae al tercer planteamiento: la necesidad de contar con agua, ya sea para sembrar o para poder vencer a la pandemia a través de la higiene.
El especialista escribió que es imperativo contar con una conciencia colectiva sobre la necesidad de cuidar el agua, y volver a establecer costumbre como cerrar la llave del grifo, poner una cuenta en la regadera y reducir el desperdicio en casa.
«Estas tres acciones, oportunas para adaptarnos a la nueva realidad, pueden empezar desde hoy y extenderse a nuestros círculos más inmediatos. No demandan más que voluntad, compromiso y organización comunitaria», puntualizó.
Artículo original: https://www.reforma.com/adaptarnos-para-crecer-2020-10-11/op190575 .