Cuando los Xi’iuy perdieron el miedo

SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 1 de mayo de 2019.- Los indígenas Pames retomaron fuerzas para el conflicto legal que emprendieron en El Tribunal Unitario Agrario (Distrito 43) -con sede en Tampico, Tamaulipas- con la firme convicción de que habrán de recuperar las más de 34 mil hectáreas que, aseguran, les fueron arrebatadas con toda clase de atropellos desde tiempos inmemoriales.

Quadratín San Luis, tuvo acceso a documentos históricos donde consta que el Registro Público de la Propiedad recibió una resolución presidencial el siete de diciembre de 1922 a favor de los comuneros de La Palma, en el municipio de Tamasopo, SLP., por tanto, esa extensión se convertía en un feudo inalienable e inembargable de conformidad con el primer título de la Ley Agraria.

Consta además que la extensión Xi´iuy está integrada por La Palma y otras comunidades como El Sabinito de Orozco, Copalillo, Sabinito de Cuesta Blanca, Mesa Colorada, Cebadilla, Manzanilla, Pozo de Sauz, Agua Puerca, Tanque de Borrego, Carrizo, La Mojonera, Rincón de Ramírez, Puerto Verde, El Huizachal, Los Postes, Cuates, Tierritas Blancas, El Zacate, Nogalillo, Verástegui, El Cañón, La Virgen, El Carrizalito Trompetero, La Lunita de San Nicolás de los Montes, La Laguna, Canoas, Tierras Coloradas, El Epazote, Vicente Guerrero, Las Guapas, El Potrero, El Carnero, Sabinito Caballete y El Saucillo, todas restituidas a esa etnia por el presidente de México, Álvaro Obregón, al amparo del derecho agrario revolucionario.

En estos archivos, aparece también el decreto del año 1669 donde el Virrey Marqués de la Mancera ejecuta la donación de toda esa extensión en favor de los pueblos originarios, aunque fue ratificado en 1696 y entonces surgió la petición de 200 pesos oro a favor de las arcas reales, para concretar este acuerdo.

MEMORIA DE INJUSTICIAS

Antes de que La Palma fuera desplazada como municipalidad -en 1932- había un grupo de mestizos en Tierras Coloradas sirviendo a la Hacienda de Estancitas (propiedad del arzobispo Don Manuel Antonio Rojo del Río y Vieyra) quienes cometían toda clase de barbaridades contra los indígenas, además de explotarlos en el campo, violaban a sus mujeres.

Félix María Calleja, quien arribó a San Luis Potosí en 1787 como comandante en jefe de la décima brigada, intervino para rematar la propiedad de Estancitas un año más tarde, posteriormente se convirtió en el penúltimo Virrey de la Nueva España.

Ya en la época del Porfiriato los hacendados invadieron terrenos comunales; “ellos eran los patrones y los indígenas tenían que servirles gratis, mis antepasados fueron esclavos en su propia tierra y viene ocurriendo lo mismo con nosotros, pero ya perdimos el miedo y tenemos el suficiente valor para enfrentar, exigirle al gobierno que nos devuelvan lo arrebataron a lo largo de la historia”, reclama Tomás Castillo Navarro, profesor y comunero la llamada Nueva Palma.

Especializado en historia de México, máxime en las remembranzas de su pueblo, Tomás forma parte del bloque étnico que ha generado revuelo por su intención de sumar a San Luis un nuevo municipio, asegura que ha llegado el momento de levantar algo más que la voz y luchar contra el relego que los mantiene -desde que tiene memoria- sobreviviendo en la serranía.

“La gente se cansó de estar fregada, todos los beneficios acá llegan a la cabecera municipal de Tamasopo y a nosotros nos etiquetan como los indios, los de la sierra, como si no fuéramos parte de esta demarcación; nuestra gente se cansó de estar pobre, de que nos lleguen las migajas y obras inconclusas que son más bien una burla para los Pames, ahí está la red de agua que la Comisión para el Desarrollo de los Indígenas (CDI) inauguró hace cuatro años, abandonada, igual que la promesa de acabar la carretera a La Palma con concreto hidráulico y en lugar de eso vinieron a echar una capa de asfalto, pero se fregaron el dinero”, narró.

EMERGE LA AUTONOMÍA

Con el primer día del año 2019 nació el municipio autónomo La Nueva Palma, sin nada más que añoranzas, ochenta familias de la etnia Xi´iuy se cobijaron en las disposiciones normativas establecidas en el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo en materia de Derechos y Cultura de los Pueblos Indígenas y Tribales para comenzar la aventura.

“Los pueblos indígenas tenemos derecho a nuestro desarrollo con identidad, a organizarnos como consuetudinariamente lo hacían nuestros ancestros y gobernarnos por nuestra cuenta con autonomía, los Pames del estado de San Luis Potosí, hemos sido sujetos de menosprecio, de ninguneo y discriminación, relegados por los gobiernos Municipales, Estatal y Federal en materia de obras, servicios y sobre todo ignorados en materia presupuestal”, fue su mensaje en Año Nuevo y, sacudieron al gobierno en el poder.

Así surgió la declaratoria fundacional del Municipio Autónomo La Nueva Palma, con el corazón y la voluntad instalaron un Consejo de Gobierno denominado Comisionados Principales del Pueblo Xi’iuy, compuesto por representantes de los 37 anexos que conforman la comunidad y aplicando el principio ancestral de la dualidad.

Meses después, han logrado erigir su iglesia y los cimientos donde operará la Alcaldía Autónoma con espacios para atender la lluvia de peticiones; actualmente hay registro de una comisión de Dualidad para resolver Asuntos y Derechos de la Mujer, otra de Programas Sociales, Económicos y Culturales que impulsarán el desarrollo con identidad, así como encargados de Juventud, Atención a los Viejos y Viejas del Pueblo, Ley y Orden.

El Consejo de gobierno se constituye por comisiones de Finanzas, Bienes Comunales y Territorio, Planeación del Futuro y Contraloría y Vigilancia; aunque hubo un llamamiento para que todos los Gobiernos legalmente establecidos reconozcan, apoyen y protejan la instauración de este gobierno autónomo, todos han enmudecido y pareciera que -otra vez- los comuneros Pames no existen.

Según denunciaron los nuevos gobernantes autónomos, hay valores entendidos entre el Ejecutivo Estatal y supuestos ejidatarios, prueba de ello fueron los más de 73 millones de pesos repartidos a ese grupo por la construcción de la supercarretera Rioverde-Ciudad Valles, pero ni un solo peso para los comuneros por aquellos once kilómetros invadidos para el trazo de la rúa; “fue un mega fraude, este recurso supuestamente llegó de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes Federal (SCT) y se entregó en complicidad con la Procuraduría Agraria, pero fue para los invasores, deberían ver la casa que ha construido el comisariado de La Palma, Concepción Alvarado, él recibió ese dinero y se compró un rancho en Valles”, contó Tomás.

Asegura que el Gobernador, Juan Manuel Carreras, ha estado pendiente de sus movimientos para frenar cualquier intento de rebelión; tan es así, que el 30 de marzo de 2016, cuando realizaron el bloqueo de la supercarretera para reclamar el respeto de sus derechos comunales, el mandatario estatal envió a Horacio Lobo Ramírez como emisario, con un mensaje algo intimidante.

“Luego vino el Secretario de Gobierno, nos mandó decir que iba a ser mediador y para eso están los tribunales con autonomía, para resolver los conflictos agrarios, estamos dispuestos a lo que sea para lograr la ejecución de la sentencia a favor de los indígenas y que el Gobierno del Estado deje de meter las manos por intereses mezquinos; el documento del Tribunal claramente dicta que los ejidatarios únicamente deben concatenarse con nosotros pero se niegan, y casualmente ellos sí tienen el apoyo del Gobernador, siempre los visita y hasta les ha llevado tractores, pero al comunero nada”, narró.

LOS PODERES SE DESMARCARON

A cientos de kilómetros, tras el escritorio de una cómoda oficina, el titular del Instituto de Desarrollo Humano y Social de los Pueblos y Comunidades Indígenas (Indepi) en San Luis Potosí, Raúl de Jesús González Vega, apenas atina a refutar las acusaciones de los indígenas sobre una presunta complicidad del aparato gubernamental para no permitir el reconocimiento de sus derechos.

“Yo he dormido en la sierra Pame y conozco la comunidad, pero las cosas no están de la manera en que creen”, comentó en entrevista con Quadratín.

Asegura que ni Indepi, ni Gobierno del Estado, tienen injerencia en los procedimientos legales de los indígenas Xi´iuy, pero debe imperar la organización de las comunidades para darle conclusión al tema legal, mediante un acuerdo entre las localidades anexas que pertenecen a La Palma, a efecto de que el Congreso del Estado pueda resolver algo al respecto.

El Gobernador de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras López, eludió hablar del asunto, lo mismo sucedió en el Poder Legislativo Potosino, donde el presidente de la comisión de Gobernación –del partido en el poder- Martín Juárez Córdova, sólo declaró que “para aspirar a convertirse en Municipio, deben tener un proyecto sustentable y la capacidad de dotar de servicios a sus habitantes, así como de generar los marcos tributarios para la recaudación de recursos propios, habría que verificar una serie de elementos”.

Pero a los Xi´iuy poco les importa el silencio de uno y los discursos a botepronto del otro, están ajenos a la demagogia; sudando a borbotones en su naciente autonomía, apenas flanqueada por los cerros… ahí cuadraron su territorio, han apisonado y nivelado la tierra para iniciar una nueva nación, la de los Pames libres.

(Tercera y última parte)