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SAN CIRO DE ACOSTA, SLP., 21 de noviembre 2020.- El cronista de San Ciro de Acosta, Edgardo Govea, compartió las dos visitas que Ernesto Canto -medallista olímpico mexicano fallecido este 20 de noviembre- hizo a este municipio, la tierra de su padre y donde fue nombrado sancirense distinguido.
Ernesto Canto Gudiño nació el 18 de octubre de 1959 en la ciudad de México, hijo de don Enrique Canto Velázquez, quien era originario de San Ciro de Acosta.
Ernesto desde muy niño se inició en su exitosa trayectoria deportiva: la caminata.
Después de una cadena de múltiples triunfos le llegaría la gloria olímpica cuando conquistó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984, teniendo como escenario el Memorial Coliseum, donde cruzó la meta en 1:23.13 horas, en la prueba de caminata de 20 kilómetros.
Cinco años después de este glorioso triunfo, el municipio -cuenta el cronista-, se sintió honrado con su presencia el 24 de junio de 1989.
La entonces Delegación Municipal del Deporte organizó diferentes eventos para esa ocasión: una carrera atlética de medio maratón, conferencias deportivas y el acto de colocación de la primera piedra de la unidad deportiva que llevaría el nombre de este deportista internacionalmente conocido y que formó parte de una exitosa generación de andarines mexicanos en la década de los ochenta.
En octubre de ese mismo año se inauguraría el campo deportivo en esa unidad.
En el teatro del pueblo de la Feria Regional de San Ciro de Acosta 2002, el Gobierno Municipal lo reconoció como Sancirense Distinguido, por las raíces de su padre.
Finalmente, en el año 2014 Ernesto volvió a visitar San Ciro de Acosta, específicamente a un evento deportivo en la comunidad de La Tinaja.