Trump, ¡uy que miedo!
Donde la situación está que arde, es en la Jaime Flores Escamilla, a cargo de Jesús Luévano Rivera, a quien le salieron algunas piedritas en el camino.
Resulta que policías afirman que les llega mensajes de WhatsApp de Luévano, donde los presiona a que se adhieran a su agrupación o sufrirán las consecuencias, toda vez que anda tendido en engrosas sus filas.
Según dicen los quejosos, Luévano no supo perder las elecciones en la Asociación de Pensionados y Jubilados del Estado contra el comandante David Muñoz Ventura y decidió formar su propia agrupación.
Ahora, sin embargo, emprendió una campaña de presión para que más elementos municipales, estatales y ministeriales lo apoyen y al parecer no le están haciendo mucho caso.
…
Quien celebró 76 años de edad y no se ve para cuándo sea sustituido, es el obispo de Ciudad Valles, Roberto Octavio Balmori Cinta, a quien El Vaticano no le ha encontrado, o no le ha querido encontrar, un sustituto.
Balmori cumplió hace un año la edad límite que marca el Código de Derecho Canónico para el retiro, pero el papa Francisco no ha determinado quién tomará su lugar en la Diócesis que abarca toda la Huasteca y otros municipios potosinos.
El líder católico dijo desde entonces, y ahora lo repitió, que no le anden moviento el tapete, porque tiene la fuerza suficiente para dirigir a su feligresía.
Y tal parece, en la Santa Sede lo han escuchado, porque hoy por hoy, ya ni siquiera se escuchan los nombres que querían su silla, la cual ha ocupado el veracruzano en los últimos 17 años.
…
A ver cómo reaccionan los antorchistas apenas conozcan la mañana de este viernes que la Cámara de Diputados no hizo caso a sus protestas para ganar espacios en el Presupuesto de Egresos de la Federación en 2020.
En los últimos días, han movilizado a los jóvenes que integran la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios en el Centro Histórico de la capital potosina, con pancartas que dejan ver las supuestas inconformidades de quienes deberían ser el futuro del país, en vez de andar en las calles.
Lo cierto es que hasta el momento, muchos de estos jóvenes no tienen becas ni tampoco garantizada su educación pública, pero lo que no se vale, es que su agrupación los use para presionar, cuando deberían estar en las aulas porque todavía no son vacaciones.
…