Superdelegado Gabino Morales con el 2021 en un sepulcro

Como una estrella menguante del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), podría definirse al personaje que en 11 meses de gestión como delegado de Programas Integrales de Desarrollo en San Luis Potosí alcanzó la cúspide política, pero también la orilla de un abismo que parece conducirlo al sepulcro en la función pública.

Gabino Morales Mendoza, el hombre que recibió espaldarazos en las primeras giras del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en territorio tunero, se ha encaminado poco a poco a ser relegado de los espacios protagónicos que llevan a las elecciones y principalmente, a la más deseada: la gubernatura en 2021.

Un año antes de su nombramiento como el hombre de confianza de AMLO, Gabino tenía 29 años de edad y se le fustigaba por no tener una trayectoria en el servicio y administración pública, pero además por carecer de un título profesional. La directora general de Inteligencia Estratégica, Análisis, Procesos y Normatividad en materia económica y política, Fabiola Sierra, descubrió que Morales no aparecía en el Registro Nacional de Profesiones, pero en octubre de 2019, la página oficial arroja que ya posee dicho aval académico.

El mayor respaldo para el actual superdelegado, era contar con seis años formando parte del Comité Ejecutivo Estatal de Morena en San Luis, donde en fechas recientes se le ha acusado de operar para mantener el control del partido.

El 27 de enero pasado, la Comisión Nacional de Honor y Justicia de Morena emitió una sanción para Gabino Morales, suspendiendo sus derechos para ocupar cargos partidistas. En el proceso se acreditó el dicho de Martha Lisset García, cuyo expediente CNHJ-SLP-737/18 contiene pruebas que la acreditan como víctima de violencia política de género; pero los folios más graves tienen las siglas de la Fiscalía General del Estado: CDI/FGE/I/D022776/18 y CDI/FGE/I/D023177/19, por presuntas amenazas, hostigamiento y abuso sexual, así como difusión de imágenes en agravio de García y Sarahí Veloz. Ambas denuncias continúan en la congeladora.

“Hay muertos que no hacen ruido”, es un filme del desaparecido cómico Germán Valdés -Tin Tan- donde su personaje central salió avante de las acusaciones como sospechoso de asesinato; en el mundo real, la analogía coloca en diferente situación a Morales Mendoza. Nadie, hasta ahora, ha salido en su defensa dentro de Morena.

Lo que sus malquerientes dicen es que Gabino es un muerto político, que pasó de ser el candidato natural a una gubernatura, a exiliado de su partido y la gestión pública.

GABINO FEST, EL GANSO COMENZÓ A CANSARSE

Llegar al llamado tercer piso de la vida, no fue tema menor para Morales y el 7 de abril de 2019 echó la casa por la ventana en una magna celebración -o acelerado destape- que reunió a los actores políticos del estado. El joven funcionario nunca imaginó que sería el inicio de su declive.

Una de las invitadas fue Úrsula Mujica Obrador, pariente cercana de López Obrador, que radica en Tamaulipas y orquestó candidaturas con éxito en Tampico y Madero. En el jardín desfilaron el presidente del poder Judicial, Juan Paulo Almazán Cué, la panista Sonia Mendoza Díaz, los secretarios de Gobierno y de Seguridad Pública, Alejandro Leal Tovías y Jaime Pineda Arteaga; legisladores locales, alcaldes, dirigentes empresariales y supuestos amigos.

Lo que más llamó la atención fue la pulsera de acceso “me canso ganso”.

DESHONROSO TOP TEN

Gabino Morales, el superdelegado más joven en México, apareció en días recientes en la lista de los 10 funcionarios inquiridos por presunto desvío de recursos destinados a los programas federales; la titular de la Secretaría de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, lo anunció durante su comparecencia en la Cámara de Diputados.

Quienes lo denunciaron argumentan que violó el Código de Ética. La reacción de López Obrador fue tajante: “El que traiciona al pueblo no es de izquierda, sino un farsante… si son asuntos graves que se les separe del cargo”.

Del delegado, como suele suceder, se recibió una escueta postura a través de un comunicado de prensa, con un discurso de inocencia.

“Debemos acostumbrarnos a que en una verdadera democracia rendimos cuentas todos los días, no hay nada raro”, sostuvo.

MAROMAS EN EL CONGRESO

La última acusación contra Morales provino del no menos escandaloso Pedro César Carrizales Becerra, “El Mijis”, quien en una visita a Michoacán sostuvo que Gabino se ha enquistado con intereses mezquinos en el poder Legislativo a través de su incondicional Edson Quintanar Sánchez.

Presionar para la contratación de Servidores de la Nación, aviadores y parientes de allegados es lo menos que le imputan.

“El delegado busca hacer su cuadro con miras al 2021, metiéndose en Jucopo y todo”, denunció Carrizales.

La contratación más reciente que le atribuyen a Morales es la del huasteco Guillermo Balderas Reyes, como secretario técnico en la Jucopo.

LÍDER DE MORENA CONTRA MORALES

El 19 de octubre el dirigente estatal de Morena, Sergio Serrano Soriano, acusó a Gabino Morales Mendoza, de entrometerse en el proceso interno de renovación y utilizar la representación del Presidente para ello.