
Combate helicóptero de la Marina incendios forestales en San Luis Potosí
CÁRDENAS, SLP., 21 de octubre de 2019.- Hablar del doctor Amonario –como se le conocía sencilla y popularmente- es hablar de 80 años de historia de este municipio, 8 décadas doradas por el auge del ferrocarril que ofreció una vida social y cultural poco vista en el resto del estado y se escribieron páginas de trascendencia nacional, lo mismo con la huelga rielera, con el nacimiento de Fernando Z. Maldonado o con el nacimiento de la reconocida artista, la muñequita que canta, Marina Herrera Aragón.
Este pasado 18 de octubre, se cumplieron 92 años de la llegada del joven pasante de Medicina Amonario Díaz de León de La Rosa a la ciudad: en aquel 1927 -quien llegó a ser un gran benefactor del pueblo y Alcalde constitucional-, tenía apenas 24 años de edad.
Platicamos de este hombre ilustre con el cronista de la ciudad, el profesor Miguel Ángel Guerrero Almazán, quien continúo la historia señalando que en febrero del año siguiente (1928), regresó a su ciudad natal, San Luis Potosí, pero solo a presentar su examen profesional, obteniendo así su título de Médico Cirujano y Partero.
Se cuenta que en ese tiempo no había médico en esta región, por lo que desde el primer día tuvo mucho trabajo, siendo una de sus primeros grandes retos el curar a los enfermos de paludismo, enfermedad que estaba muy arraigada.
La vida del Dr. Amonario en Cárdenas dejó grandes frutos en los ámbitos educativo, deportivo, cultural, y desde luego en lo que fue lo suyo: la práctica médica.
Aún se recuerdan las enormes filas para poder ser atendidos por el doctor; sus métodos y medicamentos novedosos y sus atinados diagnósticos. También el tiempo prudente que usaba en cada paciente, haciéndose cada vez más normal que los dejara al interior de su consultorio mientras salía por una puerta alterna, para atender otra urgencia incluso a domicilio, luego regresar y despachar.
Este importante personaje de la vida cardenense, cerró su consultorio para no abrirlo jamás, en enero de 1998, después de más de 70 años de servir de manera ejemplar a la comunidad de La Polvosa.
No obstante, en el periodo 1991-1994 recibió el respaldo popular y logró convertirse en alcalde de la ciudad, uno de los más queridos de la historia, periodo que puede ser considerado como de agradecimiento del pueblo a un hombre, que sin nacerlo, se convirtió en cardenense de corazón y convicciones.