Denuncian anomalías en proceso de homologación de Universidad Politécnica
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 12 de septiembre 2019.- En San Luis Potosí sigue arraigada la tradición y costumbre de recibir los sacramentos de la religión católica, comentó el vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera.
Agrega que si bien uno de los sacramentos que se ha dejado de realizar por parte de la juventud es el matrimonio, esto se debe a factores como la cultura que ha cambiado en estos tiempos y ahora no favorece mucho a los actos religiosos.
“Sigue —al menos en San Luis Potosí— arraigada la costumbre, por decirlo así, de frecuentar los sacramentos, hay algunos que han decrecido sobre todo con la población más joven como el matrimonio, en cuanto el bautismo es el más requerido por la población, en cuanto nace un niño se le quiere bautizar, muchas veces la confirmación se posterga además de que se pide que este sacramento sea en una edad cercana a la adolescencia y se debe a que en este sacramento en particular es cuando se acepta la fe cristiana no porque a uno lo lleven a la iglesia sino porque de verdad se quiere recibir por voluntad propia”, puntualizó.
Respecto a los costos que implican cada uno de estos rituales católicos el padre Priego Rivera comentó que no influyen en la población para realizarlos. “No influyen porque en realidad los costos son mínimos y estos cobros son más cuotas de recuperación o apoyo porque dentro de la iglesia hay gastos como las flores, la luz, el agua, las secretarias pues no son voluntarias.
En el caso de una boda tiene un costo de aproximadamente 600 pesos que es más o menos lo que pide el arzobispado, en cuanto a la comunión, bautismo y confirmación más o menos son unos 200 pesos, pero son más cuotas de recuperación porque la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no nos perdona el recibo y además cuando una persona declara no tener dinero igual se le da el sacramento eso no es ningún
impedimento, en cuanto a los santos oleos jamás se cobran”. Respecto a el decremento de fieles católicos el vocero del arzobispado dijo que si bien hay devotos que se alejan de la religión esto es cíclico.
“Por supuesto que las generaciones más jóvenes están más expuestas a influencias, mentalidades e ideologías que quisa durante algún tiempo los alejan de la fe pero vemos que esto es intermitente, es debido a las edades, de jóvenes se alejan, pero ya cuando van madurando se van acercando más reflexivamente, esto se ve de los 15 a los 18 años que más por convicción es por rebeldía contra sus papás que los llevan, pero después cuando maduran, cuando se enfrentan a la vida y toda su problemática caen en cuenta de la seriedad de las cosas, una de ellas la fe”, finalizo el padre Priego Rivera.