Libros de ayer y hoy
En cualquier escala histórica, los enormes problemas de la humanidad han sido resueltos sólo cuando hay inversión de talento, tiempo y recurso financiero en el conocimiento, la tecnología y la innovación.
En complemento, los problemas quedan insolutos en ausencia de inversión en conocimiento. Ejemplos abundan, pero pensemos en lo invertido para el descubrimiento de antibióticos, su síntesis y distribución, así como insulina; éstas han salvado millones de vidas.
Incluso en crisis, tales como guerras, epidemias o catástrofes, las sociedades llaman a los órganos intelectuales que son capaces de resolver problemáticas. Alan M. Turing (1912-1954), matemático británico, desarrolló la computadora analógica para descifrar mensajes en tiempos de la segunda guerra mundial. Por cierto, esto dio paso a la criptología y criptoanálisis como disciplinas matemáticas y de, las otrora llamadas, ciencias computacionales.
Ante tales hechos insoslayables, argumentar contra lo anterior no es obstinar sino obcecar. Obstinar está mas relacionado con la tenacidad del terco, obcecar con la ceguera irracional.
De igual manera, es insostenible argumentar sobre la existencia de una dicotomía: el carácter local o global del conocimiento y su aplicación. El conocimiento es global, ahora más que nunca; no existe conocimiento sino el de la humanidad toda. Es el caso de la fermentación alcohólica de agave, que dice la leyenda fue descubierta y controlada por los pueblos originarios de México, por la cual se produce tequila, mezcal y otras bebidas, esa también está globalizada.
Una vez mas, sustraernos de esa realidad concreta es ceguera irracional.
Sumado a los dos elementos anteriores, están los eventos temporales que rebasan a cualquier ficción. Mientras es cierto que una sociedad avanzada procura la inclusión de migrantes, cosa deseable, también lo es que la masificación en la migración implica situaciones que de no resolverse significarán graves complicaciones y retos. Las soluciones novedosas están en el conocimiento.
Trataré de explicar. La migración masiva del sur de México hacia las regiones norteñas está correlacionada con el incremento de casos con obesidad y diabetes tipo 2; mayormente provocada por los hábitos alimenticos, por mayor carga de carbohidratos y grasas en la ingesta.
Para el seguimiento de migrantes y su propensión a obesidad y diabetes la antropología física es relevante. La biología molecular permitiría, si se obtuvieran muestras de migrantes con autorización informada, identificar marcadores de propensión a la obesidad y diabetes; mediciones previsoras y complementarias a las políticas del sistema de salud pública.
El problema de diabetes mellitus ya cuesta al erario público una cantidad enorme. Ya en 2005, Arredondo y Zúñiga (Diabetes Care 27:104–109, 2004) reportaron que los costos directos e indirectos, solo en instituciones públicas, rondaban los 371,000 mdd. Con mas migración, los costos obviamente están incrementando.
Convocar y financiar a los miembros de la sociedad con conocimiento sería de inteligencia, no hacerlo es negligencia.
Pero para ello, debemos invertir en ciencia, tecnología e innovación. Ahora no se está haciendo, por el contrario, de hecho, se frenan las inversiones en curso.
Otro tema es la propiedad de la tecnología consecuencia del conocimiento; pero de este particular trataré en la siguiente entrega de esta columna. Después de ella, trataré la innovación.