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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 24 de julio de 2024.- María Branyas Morera, quien ostentaba el título de la persona más anciana del mundo desde hace un año y era la octava más longeva de la historia, falleció a los 117 años y 168 días en España, durante la madrugada del lunes 19 de agosto. Su hija, Rosa Moret, de 80 años, informó que María «se apagó durmiendo, que era lo que ella quería y lo que queremos todos». Sus restos fueron incinerados este martes.
La supercentenaria falleció alrededor de las 6:00 am en la residencia Santa María del Tura en Olot, donde había vivido durante las últimas dos décadas. Poco después, en su cuenta de X, administrada por uno de sus yernos, se publicó un emotivo mensaje de despedida: «Y cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando de amor» (Tagore). Me siento débil. Se acerca la hora. No lloréis, no me gustan las lágrimas. Y sobre todo no sufráis por mí. Ya me conocéis, allí donde vaya seré feliz, pues de alguna manera os llevaré siempre conmigo».
La Asociación Gerontology Research Group (GRG), encargada de verificar las edades de las personas supercentenarias (aquellas que superan los 110 años), confirma que solo 11 personas en la historia, todas mujeres, han vivido más que María Branyas. Todas ellas han fallecido. El récord absoluto de longevidad pertenece a la francesa Jeanne Calment, quien vivió 122 años y 164 días, falleciendo en 1997.
María Branyas, conocida por su fortaleza y salud, sobrevivió al Covid 19 en 2020, cuando tenía 113 años. En enero de 2023, se convirtió en la persona de mayor edad en el mundo, tras la muerte de Lucile Randon. María, quien pasó sus últimos días sentada en una butaca de su habitación, disfrutaba de la compañía de sus dos hijas y otros familiares cercanos, quienes la visitaban con frecuencia.