Economía en sentido contrario: Banamex
El silencio es propio de un sepulcro; la casa de los muertos.
Y es que el Presidente Trump insulta a México repetidamente y –de manera impensable–, el gobierno de López Obrador guarda silencio.
El sátrapa Trump descalifica a México y a los mexicanos y todos callan, no sólo el Presidente Obrador sino intelectuales, artistas y escribanos a sueldo; “no nos vamos a pelear”, dice AMLO
El gobierno de Trump obliga al de Obrador a recibir a expulsados que pretendían alcanzar el sueño americano y nadie cuestiona la debilidad del gobierno de AMLO; “yo respeto”, apenas insinúa el mandatario mexicano.
¿Por qué la cobardía frente al gobierno de Trump?
Lo cierto es que el gobierno de López Obrador y buena parte de su gabinete parecen muertos de miedo, incapaces de responder y confrontar la incontinencia verbal de Trump, a pesar del reiterado insulto a México.
Pero se podría entender el miedo de Obrador y la incapacidad de su gobierno –para responder a Trump–, por la ignorancia y hasta la indolencia diplomática del nuevo gobierno mexicano.
Sin embargo, lo que no tiene explicación y resulta intolerable, es el silencio de esa “jauría babeante” que antaño apaleó al Presidente Peña –por la supuesta debilidad de su gobierno frente a Trump–, y que hoy no solo callan sino que justifican la debilidad de López Obrador frente a Trump
Vale recordar que en agosto de 2016, cuando el entonces presidente Peña cometió el acierto de invitar a “Los Pinos” al candidato presidencial, Trump, el aparato de propaganda del “lopezobradorismo” desató una de las más feroces campañas contra el mandatario mexicano.
A la paliza se sumaron intelectuales, columnistas, articulistas y hasta enamorado de AMLO, quienes llamaron a Peña Nieto “traidor a la patria” “tonto” y “Estúpido”.
El pecado del gobierno mexicano fue diagnosticar la victoria de Trump y, por tanto, establecer un puente diplomático con el futuro presidente del país vecino del norte. Todo un acierto, guste o no a los malquerientes de Peña.
Sin embargo –y por absurdo que parezca–, el acierto diplomático fue manejado por los intereses político-electorales del “lopezobradorismo” de forma maniquea para debilitar al gobierno de Peña Nieto, lo cual consiguieron con creces.
Luego, cuando el ya presidente Trump anunció la construcción de un muro fronterizo que supuestamente “sería pagado” por México, de nuevo se soltó el aparato de propaganda que apaleó a Peña Nieto, a quien lo menos que exigieron fue “mentar” la madre a Trump y romper relaciones diplomáticas.
Hoy guardan silencio las “jaurías babeantes” que ayer criticaron al presidente Peña Nieto, a pesar de que en el gobierno de AMLO el sátrapa Trump insulta a México un día sí y otro también.
Callan las jaurías, a pesar de que el gobierno de Obrador permanece paralizado de miedo ante el vecino del norte; a pesar de que el gobierno norteamericano sometió al de López Obrador al devolver a la frontera mexicana a miles de indocumentados.
Callan cuando de manera inopinada el gobierno de López Obrador se comprometió a invertir 30 mil millones de dólares para la creación de empleos en Centroamérica; inversión que no ayudará a México sino a Estados Unidos.
De manera impensable, “callaron los mariachis” otrora preocupados por la independencia de México y la dignidad del país; “callaron los mariachis” asustados por la amenaza que significa para México la intromisión del gobierno de Trump y callaron aquellos que babeantes pedían la renuncia de Peña Nieto, a causa de “la debilidad del gobierno mexicano” ante Trump.
¿Qué gobierno mostró más miedo y más debilidad ante Trump? ¿El de Peña o el de López?
Al tiempo.