Entre amenazas y tensiones eligen a Alcaldesa interina de Tancanhuitz
SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 17 de enero de 2019.-Transitando hacia el poniente de la Huasteca Potosina se ubica uno de los escenarios más representativos de la zona: Puente de Dios- Cafetal (en la estación del mismo nombre) un imponente tesoro natural donde destellan cuerpos de agua en tonalidades esmeralda, enmarcados por el frondoso bosque y al resguardo de gigantes rocas con formas caprichosas.
El escándalo de las chachalacas dando la bienvenida en la copa de los árboles, anuncia el descenso por escalones bien dispuestos para los paseantes, en el trayecto es posible admirar la serranía, disfrutar la brisa fresca golpeando el rostro y maravillarse con decenas de vagones surcando el verdor en lo alto de la montaña; enseguida pueden extasiar los sentidos con un nacimiento de agua, pequeños arenales y vertiginosas corrientes, además de la llamada Poza Azul, donde es posible atreverse al nado en un espacio con 20 metros de profundidad y su catarata de al menos seis.
Este además fue un sitio ceremonial para los pueblos originarios, donde nativos Tének y Pames se adentraban entre recovecos para realizar meditación, consumían peyote o marihuana detrás de la cascada y al salir debían gritar con fuerza para dejar atrás cualquier mala energía. Durante temporadas de menor concurrencia, es posible observar especies felinas –como jaguar y puma- mitigando la sed en el manantial.